Fran Oliva. En los Juegos Olímpicos de Tokio 2020, Huelva tuvo presencia por partida doble. En primer lugar, con Álvaro Robles en tenis de mesa. Después, el turno fue de Laura García-Caro en los 20 kilómetros marcha.
El primero en debutar fue Robles que empezó ganando en primera ronda del cuadro individual de tenis de mesa a Gastón Alto por 4-1, teniendo que remontar un 0-1. Después, a pesar de remontar una desventaja de 2-0, su aventura olímpica en la capital nipona acabó en segunda ronda al caer ante el esloveno Darko Jorgic por 4-3.
Tras esto, Robles habla con Huelva Buenas Noticias y hace balance de su primera participación en unos Juegos Olímpicos mirando ya a la cita de París 2024.
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Una victoria y una derrota en Tokio. ¿Qué balance hace de sus primeros Juegos Olímpicos?
El balance es muy positivo porque la experiencia ha sido increíble. Simplemente el poder haber estado en Tokio ya era para mí un triunfo. Perdí con tres bolas de partido ante un rival que llegó a cuartos de final. Creo que no puedo reprocharme nada y me fui satisfecho de allí porque el rendimiento en ese partido es un indicador de que voy en la línea correcta.
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Dos partidos con dos remontadas. En segunda ronda, incluso levantando un 2-0 y teniendo tres bolas de partido. No se si se quedó en segunda ronda tras caer eliminado con un poco de amargura
Empezó el partido que parecía que me barría pero, poco a poco, me agarré a la mesa y pude sacar todos mis recursos para darle la vuelta. Se lo puse muy difícil aunque al final no pudo ser.
Cuando terminas, te quedas con la sensación de que lo has tenido ahí. Sin embargo, en ese momento, se me vino a la cabeza cómo me clasifique para Tokio, salvando muchas bolas de partido y dije para que me voy a enfadar o rallar cuando estuve en una situación parecida hace unos meses y la salvé. Entonces, es una por otra.
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Aparte de su experiencia en Tokio 2020, has podido compartir día a día momentos con deportistas de alto nivel en la ‘Villa Olímpica ¿Muy satisfactorio, no?
Es muy positivo porque la experiencia de convivir con otros deportistas, compartir como lo viven, sus expectativas, como se han clasificado… eso para mi ha sido lo más enriquecedor de todo y es lo que me he llevado de estos Juegos, que es una experiencia diferente a todo lo demás.
En muchas competiciones te encierras en tu burbuja, en tu torneo, con la misma gente de tu competición y al final el estar conviviendo con otros deportistas que están en las mismas circunstancias que tú ha sido muy enriquecedor»
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¿El ambiente en la delegación olímpica española es tan sano y bueno como se ve? ¿Con qué deportista ha sintonizado mejor?
Es lo que más me ha sorprendido. La gente está pendiente de cuando compite cada uno, como le ha ido, loo resultados que ha conseguido. Eso al principio parece raro porque puedes pensar que cada uno va a lo suyo pero no es así. La gente te va siguiendo, preguntando como te ha ido, en que ronda estás, cuando compites… y es continuo. Te cruzas en el ascensor con las chicas de voley playa o con deportistas más estrellas como los jugadores de baloncesto o con futbolistas y te preguntan. Eso ha sido lo más bonito.
Después, con el que más he compartido ha sido con Pau Gasol. Estuvimos jugando un rato al pimpón y me parece admirable porque es que ha jugado con Kobe Bryant, tiene anillos de la NBA y me impactó mucho lo buena gente que es. Luego compartí un buen rato con Dani Ceballos, cuando se lesionó, y al ser de aqui cerquita, de Utrera, parece que había buen feeling. Me dejó sorprendido porque no deja de ser un jugador del Real Madrid».
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Volviendo al ambiente de la Villa. ¿Marcado también por el covid no? ¿Ha empañado un poco eso tu paso?
Al principio me agobiaba un poco. Teníamos que hacernos una PCR de saliva todos los días, entregar un tubito que luego se analizaba. Es estresante porque si dabas positivo, te quedabas sin competir y te mandaban a un hotel medicalizado 14 días, encerrado. Eso te tiene preocupado y estresado. Teníamos que rellenar una aplicación en la que ponías que no tenias síntomas.
Eso ha sido lo más complicado del día a día pero el ambiente era una verdadera pasada. Aquello es como una «miniciudad» que la compartes con atletas, el cuerpo técnico de todos los deportes y van a lo mismo que tú y lo disfrutan como tú. Algunos van con más o menos opciones de medalla pero casi todos los que estaban allí les ha costado mucho trabajo clasificarse. Se nota que todo el mundo lo disfrutaba mucho cada segundo.
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Por cierto. ¿Cómo eran las camas? Tras saberse que eran de cartón para evitar el contacto humano entre deportistas, fue tema de conversación y muchos deportistas subieron videos demostrando que para nada eran incómodas
El colchón, para mi, fue comodísimo (ríe). La cama era pequeñita y la base era de un cartón duro pero aguantaba perfectamente.
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A nivel de competición y covid. ¿Le ha afectado mucho competir en sus primeros Juegos Olímpicos sin público en el pabellón?
El tema del público esta claro que ha afectado a ese gran ambiente que debería haber habido en unos Juegos. Lo que pasa que como tampoco había disputado unos Juegos antes, no he podido experimentar ese barullo que dicen que ahi que no se escucha nada y que te cuesta concentrarte. Eso hubiese sido bonito vivirlo pero es cierto que como llevo un año compitiendo en la liga en Alemania sin público, me he adaptado a jugar así, a puerta cerrada.
En Tokio nos hemos quedado con las ganas de vivir esa experiencia pero el covid al final afecta más a tanto protocolo a seguir, continuamente en la sala de entreno, en la de competición. Por ejemplo, en vez de ir 15 minutos al «coll área» a prepararte para tu partido e ir donde los árbitros, tenias que ir 35 minutos antes. Eso afecta a la manera de prepara el partido, te queda sin poco más frio. Hay que estar más pendiente a muchas más cosas
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Un paso por Tokio, Álvaro, con el que has puesto aún más en el foco el tenis de mesa para Huelva y el resto de España y que te ha traído muchos mensajes. ¿Cómo has recibido todo ese aluvión de mensajes y apoyo?
Por un lado me he alegrado mucho que se haya seguido cuando jugábamos y como era la competición de tenis de mesa, desconocida para muchos. Eso lo he disfrutado mucho. Luego, como siempre, con los mensajes, he intentado evadirme un poco para estar concentrado pero también estoy aprendiendo a disfrutarlo y a llevarlo de la mejor manera posible para que no me afecte.
Es verdad que en esta ocasión han sido muchísimos mensajes en este caso y lo agradezco porque ha sido una gran oportunidad para que gente que no ve mi deporte, lo vea y me vea a mi competir y encima el feedback que he tenido es que lo ha disfrutado mucho.
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Termina Tokio pero poco descanso porque en 2024 toca París. Un ciclo olímpico que afrontas de una manera muy distinta
Para mi es el ciclo de la tranquilidad. Estos últimos años han sido de mucho estrés por no haberlo conseguido. Ahora que ya lo he conseguido, me lo tomo con mucha mas calma. Todo ese aprendizaje de todos estos años, me ayudara a gestionar mas como preparo, no tener tanta ansiedad al afrontar nuevos retos y creo que así los resultados saldrán mas fluidos y lo podré gestionar mejor. Esa salud mental, de la que se ha hablado tantos en los Juegos, está presente peor cada deportista lo gestiona y se lo come de una manera.
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Ciclo que afrontas con tranquilidad y ambición
Es una mezcla. Lo bueno de este ciclo es que es de tres años, mas cortito y cuando nos queramos dar cuenta, estaremos preparando el clasificatorio.
A eso le sumas la vivencia de Tokio y lo que me llevo es que uno quiere más, pasar una ronda más. En realidad no iba mal encaminado cuando llegue a Tokio porque dije que quería avanzar el máximo de rondas. Cuando perdí con el esloveno, estaba enfadado por no poder jugar una ronda mas. Allí están los mejores y es súper complicado, cada ronda es un mundo. Ir con la ambición de las medallas no puedo decirlo a dia de hoy pero quién sabe si vas avanzando ronda tras ronda. El esloveno llegó a cuartos tras vencer al número 3 del mundo, un japonés que era favorito a medalla. Ese es el objetivo.
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Tirando de la salud mental que has dicho antes. ¿Que te parece todo lo originado con Simone Biles y su retirada de algunas competiciones por temas de salud mental?
Hay una doble cara con este tema. Mucha gente como Gasol aplaudió que se hablara de este tema y la otra cara de deportistas como Djokovic que dice que cualquier deportista que esté arriba tiene que lidiar con esto, que no es nuevo.
Estoy de acuerdo con los dos porque a veces se paga un precio por estar en el numero 1, ganar trofeos y medallas, ganar un oro. Dejando claro que la persona esta por delante del deportista, el que busca esa excelencia paga un precio y creo que va en el pack de dedicarte al deporte y la exigencia de ser un número 1.
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Lo que está claro, volviendo a tu carrera, es que ahora, como dices, te sientes totalmente realizado tras tu paso por los Juegos Olímpicos de Tokio
Si, era lo que me faltaba, la clasificación. El subcampeonato del mundo de dobles ha sido un resultado del que estoy súper orgullosísimo pero a nivel individual me faltaba esto, vivir los Juegos Olímpicos.
Ahora me siento mucho mas realizado porque si dejara de jugar hoy, podría decir que he conseguido grandes resultados y he conseguido mi objetivo. A partir de ahora, sigo siendo ambicioso pero dede la tranquilidad, que es lo que me faltaba. Desde el estrés y esa ansiedad no salen las cosas porque uno no disfruta. Ahora creo que podré disfrutar mucho más de lo que hago.
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De cara a la nueva temporada, liga alemana y mundial
Ahora me centro en la liga alemana. Hasta enero no habrá torneos internacionales salvo el Mundial en Houston en Noviembre. Eso me da más margen para prepararme, para entrenar sin mucho viaje, tranquilamente e ir preparando poco a poco el terreno.
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Por último, a nivel personal. ¿Ser padre en un mes también te habrá afectado positivamente en tu rendimiento deportivo?
Creo que la diferencia mas grande la he notado desde principios de año, cuando nos enteramos que íbamos a ser papas. Algo me hizo cambiar el chip. Estaba mas contento de lo normal, más relajado pero también nervioso por lo que se viene. Es una nueva etapa muy diferencia y uno lo quiere hacer bien y llevar todo para adelante. Pero si es cierto que estaba muy contento, me tomaba las cosas de otra manera, mucho mejor.
