Redacción. El Simpecado de la Real Hermandad de Emigrantes de Nuestra Señora del Rocío de Huelva ha regresado un año más como es tradición al santuario de Nuestra Señora de la Cinta para realizar su ofrenda floral a la Patrona de Huelva con la celebración de una Eucaristía, ocupando la sagrada cátedra el director espiritual de la Concha Peregrina, José Manuel Barral, que ha contado con el acompañamiento musical del coro de la hermandad y la ayuda del vocal de Cultos y Espiritualidad de Emigrantes, José Antonio Gallardo.
En la homilía el padre Barral tomó la iniciativa diciendo “Dios te Salve, Virgen de la Cinta. Aquí tienes a los emigrantes, a estos hijos tuyos rocieros que no dejan de mirarte. Aquí tienes a esta hermandad de rocieros y emigrantes que han venido para rezarte y que Tú, Cinta, nos amarre en la más perfecta unidad. Aquí es donde Huelva guarda su devoción, donde Huelva es más Huelva y donde tiene su corazón. Aquí en este blanco santuario del Conquero Huelva se hace plegaria, se hace ofrenda y sentimiento y mira a la Madre de Dios que aquí siempre la tenemos”.
Asimismo, manifestaba “Tú sigues queriendo que haya en esta Huelva de tu alma un Rocío de Luz, que a tanta gente le falta. Un Rocío de tu luz, que Tú nos pide que hagamos para que a tanta gente le llegue tu bendición tan deseada y no se apague la fe, no se termine la esperanza en este tiempo tan difícil en el que tanta gente te llama”.
Terminaba pidiendo “guíanos por los caminos. Haz que pronto sea de nuevo Pentecostés y que allí en tu bendita marisma, Tu Rocío se derrame otra vez. Pero mientras tantos, Cinta, bendita, haz que por toda Huelva llevemos el Rocío de tu luz y de tu amor para que todo el mundo te diga, mirándote con devoción, que Tú eres Madre Nuestra de la Cinta, que eres Rocío, del Espíritu Santo y Tú eres siempre la Madre de Dios”.
Durante el ofertorio, una de las hermanas de Emigrantes y unos niños han realizado la ofrenda floral. Mientras que el coro de la hermandad ha participado en este bonito acto poniendo sus voces para dar solemnidad al mismo que año tras año se viene repitiendo como preparación a la celebración del Lunes de Pentescotés, en este Rocío de Esperanza
El santuario permaneció abierto desde las 14.30 hasta las 20.00 horas para todos aquellos hermanos y devotos que han deseado visitar a la Virgen de la Cinta y al Simpecado de Emigrantes, que fue traslado al mismo de forma discreta. Durante esas horas se ha podido depositar a los pies del altar mayor alimentos que serán destinos a las entidades que la Hermandad de la Cinta desee enviar, aunque un miembro de la misma nos anunciaba que podrían ir a Oasis o Cáritas.