HBN. Se aproximan las fiestas navideñas y con ellas llegan también los tradicionales petardos que suelen tirarse en algunas zonas para celebrar el nuevo año. Esto para nosotros es sinónimo de fiesta y alegría, pero nuestros amigos de cuatro patas no piensan lo mismo. Fussionvet (c/ Alfonso XII, 23– 959 022 770) es la primera y única Clínica Veterinaria de Huelva en poner en marcha una terapia auditiva natural para la “desensibilización de sonidos atemorizantes” donde se enfrenta al animal, mediante la estimulación de otras zonas cerebrales y de forma controlada, a sus miedos con el fin de que vaya asimilándolos inconscientemente.
Los miedos a petardos, cohetes, truenos, tambores, etc. son generalmente irracionales y para superarlos en Fussionvet realizan una exposición controlada al estímulo con gestión emocional (desensibilización sistemática), utilizando esta técnica compleja ideada por etólogos norteamericanos y llevada a cabo por un especialista; en caso contrario, si no se realiza con un experto, se corre el riesgo de empeorar el problema. Estos miedos irracionales que sufre el animal con los ruidos de alta intensidad, son síntomas de algo más profundo por lo que, antes de nada, habría que identificar el problema originario y resolverlo en la medida de lo posible.
Estos estímulos sonoros, tan temidos por muchos perros, suelen presentarse de manera aleatoria y espaciados en el tiempo, ya que los petardos se oyen más en Navidad, los cohetes en las romerías, los truenos con las tormentas o los tambores y trompetas en Semana Santa. Esta inestabilidad hace que los perros no se habitúen a estos sonidos y tengan más predisposición a presentar miedo (hipersensibilización a dichos estímulos).
Por ello, desde Fussionvet recomiendan trabajar con el perro durante todo el año y de forma adaptada a la problemática concreta del animal. Pero si no has tenido oportunidad antes, puedes comenzar entre 6 y 8 semanas antes de que comiencen los “sucesos atemorizantes” para tratar de suavizar el impacto. En esta clínica cuentan con una sala de 25 m2, especialmente preparada para llevar a cabo las sesiones terapéuticas, que facilita el uso de diferentes máquinas y juguetes para estimular y/o desviar la atención del paciente, como por ejemplo juegos de olfato, de equilibrio, de búsqueda, etc. para conseguir que desconecte del ruido atemorizante y lo vaya interiorizando.
En los casos más severos o en los que no se ha tenido suficiente tiempo para completar terapia antes del suceso, suelen recomendar ayudar con medicina natural, como los compuestos naturales a base de Feromona Apaciguante Canina (D. A. P.), una sustancia que las perras emiten tras el parto para relajar a sus crías. No contiene ningún tipo de sedante ni tranquilizante artificial, sino que reproduce las propiedades de las feromonas caninas, por lo que es el complemento más natural con el que puedes relajar a tu mascota.
De igual forma, en los casos de mascotas que no han pasado sus primeras semanas de vida con su madre y hermanos y por ello, tienen mayor predisposición a ser más inseguros (sufriendo pánico e incluso agresividad) debemos ser más prudentes y ayudarnos con sesiones de Acupuntura para equilibrarlos; de esta manera ayudamos a los más traumatizados. En el Blog de Fussionvet, puedes encontrar recomendaciones para suavizar el impacto de los petardos sobre las mascotas.