Redacción. El Centro de Arte Harina de Otro Costal está más cerca de La Habana que nunca gracias CubaCultura 2019, el ciclo cultural que el viernes 24 de agosto inauguró su sexta edición. El diputado coordinador de Estructura, José Manuel Alfaro, junto a los responsables del Centro de Arte, Juan Manuel Seisdedos y Lourdes Santos, los coordinadores de los ciclos de cine y artes visuales, Laura de la Uz y Héctor Garrido, entre otros artistas e invitados, asistieron a la apertura de Cubacultura, que durante una semana desarrollará un amplio programa que promueve la fusión y el intercambio artístico y cultural entre las dos orillas.
Una noche que quedará para la historia de Cubacultura gracias al concierto de Haydée Milanés, una de las cantantes referentes de la nueva escena musical cubana, y Ernán López Nussa, considerado uno de los mejores pianistas latinoamericanos actuales. Ambos han unido su talento y su sensibilidad en una actuación que homenajea a La Habana, ciudad natal de ambos músicos, en el 500 aniversario de su fundación, conmemoración en torno a la cual gira buena parte de la programación de Cubacultura.
Cantante, compositora, arreglista y productora musical, Haydée Milanés es hija de la figura de la Nueva Trova, Pablo Milanés y ha estado siempre rodeada de música. Heredera de una gran tradición musical de su padre y con influencias dadas principalmente en su música, el feeling, el son y la trova tradicional cubana, los referentes femeninos de la música popular brasilera y los grandes clásicos del jazz norteamericanos, Haydée se vislumbra una de las voces más bellas y genuinas de la música popular cubana.
Ernán López-Nussa se distingue dentro de la escena musical como uno de los más notables pianistas a escala mundial. Imprescindible pianista latinoamericano de los últimos tiempos, etiqueta y dibuja el sonido de un país que se expresa y alimenta con música. Sin su piano no se debe narrar la historia de la fusión que este continente proyectas sobre Europa y Estados Unidos., tal y como lo confirman sus presentaciones por todas estas rutas . El virtuosismo de López-Nussa unido a la versatilidad e intimismo de Haydée Milanés han trasladado al público a la mejor esencia de la canción cubana.
En la inauguración de Cubacultura también se hizo un recorrido por las dos exposiciones que podrán verse esta semana. Por un lado la de fotografía Raúl Cañibano, presente en la apertura de la muestra, considerado como uno de los mejores fotográfos actuales de Cuba. Una retrospectiva de casi 30 años, con imágenes costumbristas y universales en blanco y negro de un autor que ha dicho: “Cuba es un país fantástico para la fotografía documental y agradezco a Dios cada día por la vida que tengo… pero solo si puedo vivir para siempre en Cuba.” Raúl Cañibano La Habana (1961) comenzó fotografiando bodas y quinceañeras. Pero la década de los 90 fue difícil, pues el suministro de material fotográfico que llegaba de Cuba desde Alemania Oriental se vio interrumpido y tuvo que trabajar con materiales caducados, perdiendo muchas fotos.
A finales de la década ya había comenzado a crecer su nombre como artista visual. En su serie Tierra Guajira exploró el tema de la vida en el campo, un lugar que anhelaba, un lugar que lo transportó de regreso a su infancia. Y a través del cual rindió homenaje a la humanidad, la bondad y la nobleza del campesino cubano. La serie fue galardonada con el primer premio en el Salón Nacional de Fotografía de 1999. Cañibano establece un contrapunto revelador del binomio ciudad/campo tanto a nivel estético como sociológico. Series como Ocaso, Fe por San Lázaro, Ciudad, Malecón habanero, Tierra guajira, Parrandas o Travestis ensanchan el espectro de la imagen documental rescatando las infinitas expresiones de la relación individual con los otros, sin distinguir fronteras entre espacios públicos y privados
La segunda exposición trae una nueva disciplina a Cubacultura: las Artes Gráficas, de la mano de 12 artistas cubanos «de los mejores que hay hoy día» que interpretan cada uno de los meses del año. Una muestra organizada por la embajada de España en Cuba con motivo del 500 aniversario de la ciudad de La Habana.
