HBN. Si la sencillez es una cualidad de las personas extraodinarias, las buenas ideas suelen comportar simplicidad y sentido común como sustento de su génesis. Las ideas son la fuente clave del desarrollo y el bienestar humano. Hace algunos años una idea cogió forma por la iniciativa de Cristobal Guerrero, conocido empresario de Huelva propietario junto a su familia de Óptica Santa Otilia, quien trataba de dar solución a un problema evidente, común y bastante localizado en personas cuya salud puede verse afectada por algo tan cotidiano como las compras en un supermercado.
La ‘rampa saludable‘ permite salvar las arriesgadas posturas -sobre todo para los mayores- y difultades para personas con limitaciones en movilidad y accesibilidad. Cuando el cliente llega a la caja registradora tiene que subir a la línea uno a uno los artículos que lleva en la canasta rodante, un movimiento penosamente repetitivo y muy ‘adecuado’ para lesiones de espalda, realmente tedioso. Muchos consumidores encuentran riesgo en su salud debido a no tener las ayudas necesarias para poder realizar sus compras con los problemas de movilidad derivados de su edad o su situación personal -por ejemplo, embarazadas-. Y es constatable que no existe una política de prevención de riesgos del consumidor, análoga a la existente en materia de trabajo en las cadenas de alimentación.
Con la rampa saludable la compra se eleva -manual o mecanicamente- a la altura de la operativa de caja, con lo que se evitan los esfuerzos referidos. El desarrollo del producto se ha plasmado en tres variantes: la rampa saludable estándar enteriza, la rampa saludable modular, y la rampa saludable motorizada. Cada una de ellas tiene su propia patente.
El modelo, patentado y cuyas primeras unidades fueron fabricadas en los talleres de la Fundación Valdocco -lugar donde se pretendía fueran fabricadas las rampas-, fue presentado en su día por la Comisión Social Empresarial de la Federación Onubense de Empresarios; posteriormente probada con éxito en uno de los establecimientos de la firma onubense Supermercados El Jamón.
La intención es contribuir a la mejora de la salud de las personas y crear puestos de trabajo en la Fundación Valdocco, en sus diferentes talleres de carpintería y mecánica, garantizando la calidad de los productos.
En general hacer la compra lleva un riesgo para la columna del que a veces no somos suficientemente conscientes, bien por las posturas que adquirimos al llevar las bolsas y el carrito, como por los pesos que soportamos, provocándonos esos terribles y pegadizos dolores de espalda, incluso agravar lesiones y patologías ya existentes o crear nuevas si continuamos haciéndolo mal en el tiempo. En particular, y en realidad para todas las edades, ese esfuerzo de elevar del ras del suelo en el interior del carrito de compra a la línea de caja los distintos artículos es evidente que comporta un riesgo.
Inexplicablemente el proyecto está aún por implementar en los supermercados, manteniendose esta situación de riesgo para la salud de los consumidores, y no aprovechandose aún la oportunidad de crear puestos de trabajo a raíz de esta idea, onubense, en la Fundación Valdocco.
1 comentario en «La rampa saludable, una patente de Huelva que los usuarios de supermercados siguen esperando»
mis felicitaciones al sr. guerrero