Redacción. La Comunidad de Regantes del Condado (CRC) va a liderar el proceso de trasvase para que los recursos hídricos superficiales lleguen a los regantes de Doñana y a sus agricultores a través de las
infraestructuras que se acometerán para que este recurso no se quede por el camino.
Con 2.400 hectáreas adscritas y un ámbito territorial que abarca cuatro municipios –Almonte, Rociana, Bonares y Lucena del Puerto-, la CRC Condado de Huelva es, tanto por normativa como por ámbito territorial, la más idónea para recepcionar el trasvase de aguas procedentes de la Demarcación del Tinto, Odiel y Piedras al Condado de Huelva con el fin de preservar los Excepcionales Valores Medio Ambientales de este Espacio Natural de Doñana, y permitir la coexistencia con las actividades que se desarrollan en él.
La CRC aglutina a todos los regantes que, en la actualidad, tienen suelo agrícola regable conforme al Plan Especial de Regadíos del Norte de la Corona Forestal y que están dentro del referido ámbito territorial. Esta superficie tiene derecho al trasvase aprobado por Ley 10/2018, conforme a lo establecido en su artículo 1.2.d), habiéndose constituido en Comunidad de Regantes a instancias de la propia Confederación Hidrográfica del Guadalquivir.
Para que el trasvase sea una realidad, es además imprescindible llevar a cabo las correspondientes infraestructuras hídricas que permitan no poner en riesgo los recursos de las demás Comunidades de Regantes de la Provincia de Huelva y sus expedientes de modificaciones de características. La CRC es la Comunidad que reúne el mayor número de hectáreas adscritas de superficie agrícola regable en el ámbito de Doñana y puede garantizar que realmente el trasvase alivie las extracciones sobre el acuífero de Doñana, que es el fin tanto del Plan Especial de la Corona Norte, como de la Ley de Transferencia de Recursos aprobada.
Ante las recientes noticias publicadas por los medios de comunicación en estos días sobre la posible declaración sobre explotación del acuífero de Doñana y las medidas que podrían tomar al respecto las administraciones, la Comunidad de Regantes del Condado quiere trasmitir que se estaría poniendo en grave riesgo la viabilidad de las explotaciones agrícolas de todos sus miembros en suelo agrícola regable y que supondría un descalabro social de repercusiones económicas sin precedentes en el Condado, ya que el 80% de la economía de los cuatro municipios está sustentado directa o indirectamente por la agricultura de regadío.
Por ello, desde esta Comunidad se hace un llamamiento al resto de Comunidades de Regantes dentro del ámbito de Doñana y demás usuarios afectados para que de forma conjunta se abra una mesa de diálogo con las administraciones públicas competentes para promover la materialización de las infraestructuras hídricas necesarias en la Demarcación del Guadalquivir para consumar el trasvase.