Los investigadores onubenses aplauden la apertura de los documentos sobre Huelva del Archivo de Medina Sidonia

Mari Paz Díaz /  HBN. Un auténtico paraíso para los investigadores y los amantes de la historia. Así podríamos calificar al Archivo General de la Fundación Casa Medina Sidonia (AGFCMS), un centro de investigación donde se conserva la documentación que se ha ido formando desde la Edad Media, a partir de la administración de los señoríos vinculados a la Casa Medina Sidonia y sus casas nobiliarias, como la Casa de Villafranca del Bierzo, la Casa de los Vélez y la Casa de Paternò. Un legado cuya gestión corresponde a la Fundación Casa de Medina Sidonia, que tiene el objetivo de preservar, difundir y promover este patrimonio histórico-artístico, que sirve como instrumento de investigación y conocimiento.

En total, este interesante archivo posee seis millones de documentos en más de 6.000 legajos, donde se guardia la historia de diferentes familias y casas señoriales que se fueron uniendo a la Casa de Medina Sidonia, constituyendo uno de los archivos privados más importantes del mundo. Un espacio en el que la provincia de Huelva cuenta con un sobrado protagonismo, teniendo en cuenta que, en su interior, podemos encontrar archivos que permiten construir muchas de las páginas de la historia onubense, dado que en la documentación de la Casa de Medina Sidonia duerme la administración señorial, desde la Edad Media hasta la disolución de los señoríos, a principios del siglo XIX, de una gran parte de las comarcas del Condado, Costa o Andévalo.

Es decir, todo aquel interesado en estudiar la historia de municipios como Huelva, Moguer, Puebla de Guzmán, Alosno, Gibraleón, Aljaraque, Palos de la Frontera, Bollullos del Condado, Almonte o Niebla tiene una visita obligada a sus salas. Por ejemplo, entre los múltiples archivos en los que podemos bucear podemos citar la existencia de una copia simple de una carta de merced de Alfonso XI concediendo a la villa de Niebla la comunidad de pastos con Sevilla, Jerez de la Frontera, Carmona, Arcos de la Frontera, Medina Sidonia, Alcalá, Vejer de la Frontera, Huelva y Gibraleón, así como la facultad de cortar toda la madera que necesitaran para construir sus casas, arados y otras cosas, o, bien, un romance de los estragos causados por el terremoto y el posterior tsunami que asoló las costas de Portugal, Huelva y Cádiz, es decir, el conocido Terremoto de Lisboa de 1755. Eso, sólo por citar un par de ejemplos. 

Como pincelada de la ingente cantidad de información sobre Huelva que atesoran sus salas, podemos recordar la enorme relación que han tenido Huelva y Cádiz durante siglos, tal y como mostrábamos en este reportaje en el que se ponía de manifiesto la conexión que existió entre ambas provincias al crearse la antigua provincia de Sanlúcar de Barrameda: ¿Por qué nos parecemos los onubenses y los gaditanos? Las relaciones históricas de dos provincias hermanas

Y es que no podemos olvidar que los manuscritos custodiados por Luisa Isabel Álvarez de Toledo, conocida como la Duquesa Roja, tienen un contenido muy diverso, desde un privilegio rodado de Fernando II, pasando por el asentamiento de colonos o el pago de impuestos hasta una magnífica colección de mapas y planos. Todo ello, además, complementada con la biblioteca antigua, donde reposan más de 1.000 libros fundamentales para entender los siglos XVII y XVIII.

Recordemos que, tras la muerte en 1955 de su padre, el XX Duque de Medina Sidonia, Joaquín Álvarez de Toledo y Caro, fue Isabel quien comenzó un año después a acondicionar el tercer piso del Palacio de la Casa de Medina Sidonia en Sanlúcar de Barrameda para convertirlo en el depósito del archivo, donde quedará definitivamente instalado en 1960. A partir de este año, la Duquesa iniciará la descripción, organización y catalogación de los fondos, poniendo en valor su riqueza desde el punto de vista paleográfico, diplomático, filológico y archivístico. Documentos que, hasta ese momento, se encontraban en Madrid. Para su conservación, Isabel creó la Fundación Casa Medina Sidonia en 1990. 

Un impresionante archivo que ha vuelto a ser noticia tras conocerse la firma del convenio suscrito en Sanlúcar de Barrameda entre la Consejería de Cultura y la Fundación Casa Medina Sidonia, acuerdo que permitirá digitalizar los más de 6 millones de documentos del archivo histórico de la institución. Un proyecto que cuenta con una inversión de 300.000 euros y que se desarrollará entre 2018 y 2019.

El consejero de Cultura, Miguel Ángel Vázquez, y la presidenta de la Fundación, Liliane – Maria Dahlmann, ratificaban el acuerdo que, en palabras de Vázquez, «va a hacer accesibles siglos de información contenida en un archivo amplísimo que se ha ido formando desde la Edad Media, a partir de la documentación que generaron las administraciones de las diversas casas nobiliarias».

Durante el acto, Vázquez indicaba que «la Consejería y la Fundación tenemos una misión compartida, que es la de extraer todo el valor y el conocimiento posible a nuestro rico patrimonio. Y estoy seguro de que los frutos de esta cooperación serán muy interesantes. Estamos hablando de 6.314 legajos, que reúnen alrededor de seis millones de documentos, los cuales han ido conformando un universo cultural, donde los aspectos económicos, sociales, geográficos, territoriales y políticos, dan valor y significado a todo un proceso histórico, que se remonta al siglo XII».

El convenio permite que el Instituto Andaluz de Patrimonio Histórico (IAPH) haya emprendido una digitalización que se realiza in situ y que tiene como objetivo fundamental garantizar su conservación y poner al servicio de la ciudadanía la información que contiene. «Un ingente patrimonio documental que estará abierto a la consulta libre y gratuita por parte de cualquier persona que quiera acercarse a su conocimiento, ha explicado el consejero de Cultura. Para la Consejería de Cultura «es una iniciativa ilusionante, que permite avanzar en el conocimiento y protección del patrimonio bibliográfico y documental, y que ayuda a conectar a la ciudadanía con el saber», ha señalado Vázquez.

No es la primera vez que Fundación e Instituto colaboran. Entre 2006 y 2011 se procedió a la catalogación de bienes muebles históricos de la Fundación, un proyecto con contó con una inversión de casi 200.000 euros. También, entre 2002 y 2011, el Instituto Andaluz del Patrimonio Histórico procedió a la restauración de una serie de tapices históricos del siglo XVI, unos trabajos de investigación, estudio y restauración material de un conjunto de 6 grandes tapices pertenecientes a la antigua Casa ducal de Montalto, productos del taller del licero flamenco Franz van Hefke. La inversión realizada ascendió entonces a 36.708,27 euros.

Por todo lo anterior, son muchos los investigadores y estudiosos de la provincia de Huelva que han aplaudido esta iniciativa y que ya esperan ansiosos al próximo año 2019 para poder acceder a estos archivos que se están digitalizándose con el deseo de conocer un poco más y mejor la historia onubense, gracias a estos documentos que han llegado hasta nuestros días. Sin duda, una joya que debemos conservar y poner en valor.