Redacción. Nuestro obispo, José Vilaplana, ha ordenado esta mañana en la Catedral a cuatro nuevos sacerdotes para nuestra diócesis, a los que ha pedido que sean sacerdotes «santos, pastores y misioneros». Al finalizar la celebración, D. José Vilaplana, ha querido mostrar su alegría y dar gracias a Dios por estos nuevos presbíteros que dedicarán su labor pastoral a nuestra Iglesia diocesana. Los nuevos sacerdotes son Víctor Manuel Domínguez, Álvaro Gómez, Francisco José Feria y Rafael Carretero.
Víctor Manuel Domínguez tiene 41 años y es natural de El Almendro. Tras su ordenación como diácono fue destinado a Almonaster la Real, donde ha estado los últimos meses. También de la comarca del Andévalo es Francisco José Feria, concretamente de Villanueva de los Castillejos, donde nació hace 42 años. Su labor como diácono la ha ejercido durante los últimos meses en la parroquia de San Pedro de Huelva, una función que ha compaginado con la Pastoral Penitenciaria, con la que ha colaborado. Muy dedicado a la música, es uno de los fundadores del coro del Seminario, que pone música y voz a numerosas celebraciones diocesanas.
Rafael Carretero es de Sevilla, pero ha cursado sus estudios como seminarista en Huelva. Tiene 40 años, es licenciado en Historia y han sido los municipios serranos de Fuenteheridos, Los Marines, Cortelazor y Castaño del Robledo los que le han acogido como diácono. Álvaro Gómez es el más joven de todos. Nació hace 31 años en Isla Cristina y es licenciado en Filología Inglesa. Su labor como diácono la ha desempeñado en la parroquia Santa María Madre de la Iglesia de Huelva.
Estas ordenaciones son una realidad justo un día antes de que la Iglesia celebre la Jornada Mundial de Oración por las Vocaciones y la Jornada de Vocaciones Nativas y en un año en el que se ha dado a conocer, durante la campaña del Seminario, con motivo de la solemnidad de San José el pasado mes de marzo, que es el curso que se cuenta con la cifra más alta de seminaristas y de ordenaciones desde que D. José Vilaplana es Obispo de Huelva.
Para nuestro Obispo se trata de un acontecimiento que “nos produce una gran alegría, ya que son personas que han dicho sí a Jesucristo y que han decidido entregar su vida al sacerdocio, una opción que hoy en día no es fácil, por lo que como comunidad cristiana en Huelva debemos acompañarles con nuestra oración y dar gracias a Dios”.