HBN. La Dirección General de Tráfico (DGT) llevará a cabo la próxima semana una campaña especial de control de velocidad en las carreteras de Huelva, que se extenderá desde el 16 hasta el 22 de abril. Para ello, está previsto un incremento de los controles en las vías de la provincia, tanto por parte de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil como de policías locales de varios municipios colaboradores.
Esta campaña, que se enmarca dentro del calendario anual de acciones que la DGT ejecuta sobre seguridad vial, tiene por objetivo concienciar sobre la peligrosidad del exceso de velocidad en la conducción, así como ejercer una labor preventiva. De esta forma, a lo largo de la próxima semana se incidirá en que llevar una velocidad adecuada podría evitar prácticamente una cuarta parte de los muertos en accidente de tráfico registrados en España; que a partir de los 80 kilómetros por hora es imposible que un peatón se salve de un atropello; y que a 120 kilómetros por hora necesitamos para detenernos una distancia superior a un campo de fútbol.
En la provincia de Huelva, el año pasado algo más del 50% de las denuncias por infracciones de tráfico lo fue por velocidad y el 20% del total de puntos detraídos lo fue por infracciones en materia de velocidad. Además, en 2017 en la provincia el exceso de velocidad fue un factor que estuvo presente en el 14% de los 450 accidentes con víctimas.
Dos campañas en 2017
El año pasado se realizaron dos campañas especiales de control de velocidad en las carreteras de Huelva. En ambas, la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil controló 11.937 vehículos y se formularon 1.667 denuncias por exceso de velocidad.
De esta forma, durante la próxima semana se hará especial hincapié en aquellos tramos de las carreteras secundarias de la provincia en los que existen mayor siniestralidad o en aquellos tramos cuyo trazado les haga susceptibles de que se produzcan accidentes por velocidad excesiva.
Asimismo, esta campaña de la DGT también servirá para insistir en que el exceso de velocidad no sólo incide en la seguridad vial, sino que tiene una importante influencia negativa sobre el medio ambiente, la calidad de vida y el consumo de combustible. Dependiendo del tipo de vehículo, el consumo ideal de combustible suele estar entorno a una velocidad de 90 km/h. Si aumenta a 120 km/h, el consumo se incrementa en un 30%.