Mari Paz Díaz. El onubense José Luis Leandro Rodríguez ha sido reelegido para los próximos cuatro años como decano presidente del Colegio de Ingenieros Técnicos de Minas de Huelva, Sevilla, Cádiz, Cáceres, Badajoz y Canarias. Se trata, por tanto, de su segundo mandato en esta entidad profesional. Un decanato, además, que compagina con el cargo de presidente del Consejo General de Colegios Oficiales de Ingenieros Técnicos de Minas españoles.
Ingeniero Técnico de Minas y Licenciado en Económicas, Leandro Rodríguez es funcionario del Cuerpo de Ingenieros Técnicos de Minas del Ministerio de Industria y Energía. Después de pasar por diferentes provincias españolas, su destino le trajo a Huelva, siendo transferido a la Consejería de Industria de la Junta de Andalucía. Y, desde hace 19 años, trabaja en la Consejería de Hacienda y Administración Pública.
Además de todo ello, Leandro Rodríguez imparte clases como Profesor Asociado del Departamento de Ingeniería de Diseño de la Universidad de Huelva desde hace más de 22 años.
Son los principales datos de una extensa trayectoria profesional que ahora se ha visto incrementada con su reelección para representar a los ingenieros técnicos de minas de Andalucía Occidental (Huelva, Sevilla y Cádiz), además de las comunidades autónomas de Extremadura y Canarias.
Por todo ello, en Huelva Buenas Noticias hemos querido conocer mejor a este onubense, al tiempo que nos adentramos en los retos a los que se enfrenta esta profesión en esta nueva etapa, una etapa en la que la minería tiene muy buenas expectativas de futuro, según nos explica José Luis Leandro.
-¿Cómo se siente después de haber sido reelegido decano presidente del Colegio de Ingenieros Técnicos de Minas de Huelva, Sevilla, Cádiz, Cáceres, Badajoz y Canarias?
-Es un honor seguir al frente de esta institución gracias al respaldo dado por los colegiados a la labor que venimos desarrollando y al apoyo de un equipo al que se han incorporado ahora dos nuevos refuerzos, que van a hacer todavía más fácil nuestro trabajo. El mérito de lo que hagamos será de mi equipo, la responsabilidad solo mía.
-¿Qué supone para un onubense el ser el representante de los profesionales de otras muchas provincias?
–Históricamente, la presidencia de nuestro colegio ha sido desempeñada siempre por compañeros de Huelva puesto que, aunque su territorio ocupa 7 provincias, la sede central del Colegio se encuentra en nuestra ciudad desde su fundación allá por la década de los 50. Por lo tanto, es algo habitual. Sin embargo, sí es llamativo que compagino el decanato del Colegio de Huelva con el cargo de presidente del Consejo General de Colegios Oficiales de Ingenieros Técnicos de Minas españoles. En esta labor, soy el único onubense que ha desempeñado este cargo a lo largo de la historia. Y, además, también he resultado reelegido recientemente. Y, por ello, me siento especialmente orgulloso que un representante de nuestro colegio sea presidente nacional con todo lo que eso conlleva.
-¿Qué personas le acompañan en su equipo?
–Cuento con un excelente equipo de profesionales y muy variado. Hemos conseguido ir convenciendo a diferentes compañeros para que fueran incorporándose y completando las distintas áreas de trabajo en las que suelen ejercer nuestros titulados. De esta forma, en la Junta de Gobierno disponemos de gente que trabaja en el ejercicio libre profesional evidentemente y, además, en empresas públicas como ADIF; en explotaciones mineras, tanto en canteras como en minas; otros trabajan en la administración minera; o, bien, en la Universidad de Huelva como profesores de la Escuela, que, por cierto, somos dos; también hay funcionarios de la administración del Estado y, concretamente, mi más directo colaborador el secretario Antonio Arenas, que trabaja como técnico en la Subdelegación del Gobierno en Huelva. En definitiva, el equipo abarca un amplio abanico de actividades.
Además, a los miembros de la Junta de Gobierno hay que sumar los seis delegados que nos representan en cada una de las provincias donde nuestro Colegio tiene jurisdicción, es decir, en Sevilla, Cádiz, Cáceres, Badajoz y las dos de Canarias. Son todos profesionales de reconocido prestigio entre los que encontramos expertos en explosivos, en túneles y proyectistas libre ejercientes. En nuestra opinión, todo un lujo de equipo.
-¿Qué objetivos tiene la junta para este nuevo mandato?
–Para estos cuatro años, nos hemos marcado algunos objetivos nuevos. La mayoría es de carácter interno y de interés lógicamente sólo para los colegiados. Pero, en líneas generales, podemos decir que pretendemos continuar con la línea de austeridad presupuestaria que nos aconseja los tiempos que corren, sin menoscabo de la amplia gama de servicios que prestamos a nuestros colegiados, sobre todo a los ejercientes. A partir de aquí, nos gustaría profundizar y tratar de mejorar en lo posible nuestra labor de defensa de la profesión, por ejemplo, en cuestiones contra el intrusismo. La globalización trae muchas ventajas, pero algunos inconvenientes, como ocurre con el hecho de que aparecen personas que sin tener la titulación adecuada pretenden hacer trabajos que no le corresponden, ni tienen competencia y atribuciones para ello.
Esto, que puede parecer una anécdota, empieza a ser algo preocupante, cuando muchos de nuestros profesionales jóvenes tienen que emigrar para ejercer.
-¿Qué proyectos pretende llevar a cabo?
–La mayoría es de carácter interno. No obstante, de cara a la sociedad, trataremos de incorporar a los estudiantes al Colegio antes de que terminen sus estudios creando la figura del ‘pre-colegiado’ para el próximo curso 2013-2014 con el fin de que puedan disfrutar de algunas de las cosas que ofrecemos a los colegiados, como cursos, jornadas, seguros, etcétera. Esta experiencia la vamos a llevar a cabo simultáneamente en los doce colegios que, como el nuestro, componen el Consejo General.
-¿El punto estrella de cara a los próximos cuatro años?
-Es difícil elegir sólo uno. Quizás, el más importante en estos momentos sea disminuir la bolsa de empleo que tiene el Colegio hasta conseguir que no haya inscrito ningún compañero. No es ninguna utopía, pues, hace 7 u 8 años, el número de compañeros desempleados era mínimo.
De hecho, llegaban algunas ofertas de trabajo para profesionales que teníamos que derivar a otros colegios de minas, porque los pocos que había inscritos en la bolsa o no les interesaba o no cumplían con los requisitos de la demanda. Esperemos que eso sea posible de nuevo. Desde luego, por falta de empeño no será.
Otro proyecto destacado será visitar todos los institutos de bachillerato de las provincias de nuestro territorio durante el próximo curso académico con el objetivo de dar a conocer nuestra bonita rama de la Ingeniería a los estudiantes del último año y que se animen a estudiar Minas en la Universidad de Huelva. Este año, como experiencia piloto, ya hemos visitado unos quince institutos entre Huelva y Sevilla de los casi cien más cercanos, pero se ha hecho entre abril y mayo y los alumnos ya preparaban la Selectividad, con lo que no ha sido posible coordinar las charlas con los responsables educativos.
Por tanto, a partir del curso que viene empezaremos desde octubre. Con esto, queremos hacer cantera, atraer a los estudiantes a Huelva, a nuestra profesión, a nuestra Universidad. Solo con conseguir que cuarenta o cincuenta jóvenes estudien Minas aquí, habremos cumplido nuestras expectativas.
Además, llevamos a gala que a pesar de la enorme crisis la nuestra es probablemente una de las profesiones con menos desempleo en términos relativos y eso es muy importante a la hora de elegir estudios. Y, por último, decir que quizás somos el único Colegio profesional que da becas a casi todos los estudiante de minas, compatibles con el resto de ayudas oficiales. Es como un complemento para animar a los estudiantes indecisos que se decanten por la minería.
-Hablemos del Colegio. ¿Qué funciones tiene?
–Esta pregunta para nosotros es más importante de lo que parece, puesto que los colegios profesionales hacen una labor muy poco conocida para el ciudadano e, incluso, me atrevería decir que para algunos colegiados. Se trabaja sin ruidos en una labor discreta, casi anónima, pero creo sinceramente que efectiva y necesaria. Siempre se dice que si no existieran los colegios profesionales seguro estaríamos reuniéndonos para crearlos.
Contestando a su pregunta, estatutariamente tenemos muchas funciones entre las que destacamos: el asesoramiento a las administraciones públicas, corporaciones oficiales, empresas, entidades y sociedad en general en todos aquellos asuntos que directa o indirectamente afecten a la profesión. Por otro lado, informamos de los proyectos de ley y las disposiciones de cualquier rango que tengan incidencia en nuestra actividad profesional. También participamos en los consejos u organismos consultivos de las distintas administraciones públicas en materia de nuestra competencia.
Con las universidades colaboramos en la elaboración de los planes de estudio de las enseñanzas relacionadas con nuestra carrera. Del mismo modo cooperamos con la Administración de Justicia y demás organismos oficiales en la designación de colegiados requeridos para realizar informes, peritajes u otras actividades similares. A veces, nos vemos obligados a intervenir, por la vía de la conciliación o arbitraje, en cuestiones entre colegiados y entre éstos y las empresas o particulares. Velamos por la ética y la deontología profesional y por el respeto a los derechos de los ciudadanos y como le decía antes luchamos contra la competencia desleal y el intrusismo. Esto solo es posible desde las organizaciones colegiales. Por último, organizamos muchas actividades de carácter profesional, formativas, culturales, asistenciales y de previsión.
-¿Por qué el Colegio de Minas tiene esta curiosa división territorial, donde se integran lugares como Huelva, Badajoz o Canarias?
-Desde su fundación, los colegios nuestros han estado al cobijo de las escuelas, primero de Facultativos, después de Peritos, más tarde de Ingenieros Técnicos, ahora ya, de Grados en Ingeniería. Estaba claro que Huelva iba a ser cabecera de colegio para los egresados de nuestra centenaria escuela y, a nuestra provincia, se le sumaron las provincias limítrofes con mucho menor tradición minera. Por eso, las sedes de los doce colegios de minas españoles todavía coinciden con Escuelas, como sucede con Asturias, León, Linares o Cartagena, entre otras.
-¿Cuáles son los principales problemas de los ingenieros técnicos de de minas en la actualidad?
–Aparte de encontrar trabajo como cualquier otra rama técnica -aunque en menor medida como hemos comentado-, nuestro principal problema es el encasillamiento que a veces percibimos de la sociedad. Muchos piensan que sólo podemos trabajar en minería. Y nada más lejos de la realidad. Afortunadamente, desde siempre, tenemos muchos compañeros trabajando en la más amplia gama de actividades económicas y además relacionadas con nuestra formación.
Tenemos gente trabajando, aparte de en la explotación de recursos naturales, en energía, medio ambiente, calidad, seguridad, prevención de riesgos laborales, metalurgia, funcionarios, obra civil, topografía, túneles, obras subterráneas de todas clases, voladuras, pirotecnia, combustibles líquidos y gaseosos, captaciones de aguas y un sin fin de actividades.
-Centrándonos en Huelva, ¿cómo definiría su situación actual?
-La situación de la minería onubense está volviendo a vivir un renacer que es preciso comentar con detalle. Con la fuerte demanda de metales procedente de los países emergentes están volviendo a ser rentables minas que se encontraban cerradas como consecuencia de la bajada de precios que hubo en las décadas finales del siglo XX. En algunos casos se ha llegado a triplicar el precio. Esta demanda se espera además que continúe durante cierto tiempo, quizás algunas décadas. Eso ha hecho que las empresas extractivas de todo el mundo empiecen a pensar la rentabilidad de la reapertura de las minas de nuestra zona metalogenética. Concluyendo, la situación, en nuestra opinión, es moderadamente optimista en el sector minero de Huelva.
-¿Sigue Huelva teniendo peso cuando se habla de minería?
–Huelva capital, según los historiadores, tuvo entre sus principales impulsores para su creación a las minas que se explotaban en el primer tercio del siglo XIX, por lo que tiene una larga tradición. Huelva debe tener todo el peso cuando se habla de minería, pues es un binomio que nunca se ha descompuesto, ni en los peores tiempos de la crisis del sector minero al final del siglo XX. Las autoridades onubenses (alcaldes, diputados, senadores, parlamentarios, etcétera) quizás deberían aparcar algunas veces sus diferencias y, al menos en este sector, unir fuerzas para apoyar la puesta en explotación de todas las minas.
Nos consta que a todos les hemos oído hablar más o menos de que la minería en este momento es vital para la economía provincial y que hacen cosas, pero quizás uniendo voluntades todo sería más fácil.
-¿Cree que son viables los proyectos que se quieren poner en marcha en Huelva, como el de Minas de Riotinto?
-Si miramos el futuro de la minería metálica de la faja pirítica con el dato de la subida del precio de los metales en los últimos años, evidentemente sí. Si a eso le añadimos la fuerte demanda de este tipo de producto, todavía mejor.
Pero, no es oro todo lo que reluce. Hay muchas cuestiones que han de ser tenidas en cuenta por nuestras autoridades a la hora de aprobar las aperturas y reaperturas. Aspectos medioambientales, control de reservas, inversiones que tengan cierta permanencia, participación de la zona, experiencias anteriores. Todo eso metido en una coctelera hace que las autoridades sean cautelosas, pero, indudablemente, salvados todos los problemas, la respuesta debe ser sin duda un sí rotundo a la minería. Nosotros, desde el Colegio, no podemos decir otra cosa. Es obvio. En caso contrario no estaríamos aquí, dejaríamos el paso a otros que creyeran en el futuro de la minería.
-¿Cómo se presenta el futuro?
–En nuestra opinión, bueno. En muy pocos años abrirán -o mejor dicho reabrirán- varias minas que ya se están preparando para ello, Almagrera, Lomero, puede que hasta Concepción y La Nava. Incluso nos atreveríamos a pronosticar que se estudiará con detalle La Zarza y alguna otra. Pero, para eso, hay que estar preparados y si hay universitarios formados en minería no habrá ningún problema con la demanda, pero sí los habrá para otro personal, pues se está trabajando poco en ese sentido. Necesitamos formar a jóvenes en empleos de técnicos no tan cualificados, puesto que nos tememos que Huelva no absorberá las necesidades de las empresas, como palistas, conductores de volquetes, barreneros, artilleros, sondistas, operadores y decenas de empleos de especialistas que, a día de hoy, desgraciadamente, no disponemos. Hay que formar a gente de nuestra provincia para que ocupen esos buenos puestos de trabajo y no tengamos que importarlos de otros lugares.
-Para terminar, un mensaje para los onubenses.
–Quien se quiera encontrar con gente que apoya firmemente la minería como fuente de riqueza y empleo para Huelva y su provincia, sólo tiene que llamar a la puerta de nuestro Colegio, a cualquier miembro de nuestro colectivo, a su Junta de Gobierno y a su presidente, que estaremos a su disposición.
4 comentarios en «José Luis Leandro Rodríguez, un onubense que representa a los ingenieros técnicos de minas de toda España»
Aprovechemos a estos excelentes profesionales para aportar riqueza a nuestra querida Huelva.
La mineria es el punto de partida y pilar fundamental que hace posible la existencia de la tecnologia que disfruta la sociedad.
En un tiempo no muy lejano, el ser humano tendrá obligatoriamente que comenzar a explotar los minerales del espacio exterior a nuestro planeta, al objeto de poder mantener y mejorar el nivel de exigencia tecnologico.
Las Escuelas y Colegios de Minas realizan unas actividades sumamente valiosas para que la mineria siga avanzando, atendiendo al insoslayable compromiso que tiene en una sociedad moderna.
José Luis recibe mi felicitación personal a algo que es de justicia por tu buen hacer en un trabajo continuado. Me enorgullece contarme entre tus amigos. Un saludo, Pepe
José Luis, Felicidades por la reelección
El Ingeniero de Minas tiene mucho que aportar en el desarrollo de una sociedad avanzada y con la incondicional predisposición del equipo que lideras , sin duda aumentara la calidad de nuestra imagen y de nuestros conocimientos
Gracias por tu esfuerzo y dedicación constante. Un abrazo