HBN. Huelva es la provincia andaluza con mayor masa forestal de pino piñonero, con 92.000 de las 190.000 hectáreas de la superficie de Andalucía, comunidad que aglutina un tercio de esta específica masa forestal del planeta.
La relevancia sociocultural y económica de los bosques de pino piñonero es notable, por sus posibilidades recreativas, paisajísticas y de aprovechamiento en la producción de piñones.
El piñón es un fruto seco consumido por el ser humano desde el paleolítico, cardiosaludable, y de calidad gastronómica reconocida internacionalmente. Es ampliamente utilizado en la cocina del mediterráneo, Asia, Oriente Medio y Estados Unidos. Países como Italia, Francia, Suiza, Alemania y EEUU importan anualmente grandes cantidad de piñón español, que mantiene precios entre los 40 y los 70 euros el kilo.
El piñón de Andalucía está considerado de una calidad superior, con características singulares respecto al piñón de otros orígenes, como su mayor contenido en determinados minerales o aroma a resina, y con una historia de producción y transformación tradicionales.
Estas condiciones llevaron a que en 2016 el Parlamento de Andalucía aprobara una moción de IU para impulsar la declaración de Indicación Geográfica Protegida Piñón de Andalucía, según lo dispuesto en el Reglamento europeo 2081/92.IU ha presentado una moción al Pleno del Ayuntamiento de Cartaya para impulsar una cooperativa agraria que gestione directamente el aprovechamiento de las 12.000 hectáreas de pino piñonero de propiedad municipal.
En la moción que se debatirá en el primer Pleno de 2018, IU también propone que “hasta la creación de la cooperativa, se introduzcan cláusulas sociales y de agricultura ecológica en las licitaciones y se impulse el proceso de declaración de la Indicación Geográfica Protegida Piñón de Andalucía aprobada por el Parlamento andaluz a propuesta de IU, en colaboración con las empresas del sector”.
IU lamenta, en una nota enviada a los medios de comunicación, que “la escasa vertebración del sector del piñón en Andalucía y la ausencia de iniciativa pública para regularlo mantenga en la oscuridad a uno de los sectores agroalimentarios andaluces con mayor potencial de crecimiento”.
Según la citada nota, el Ayuntamiento de Cartaya, localidad andaluza con mayor superficie de pinar municipal, subasta anualmente el aprovechamiento de sus 12.000 hectáreas, que pueden producir hasta dos millones de kilos de piña. La empresa adjudicataria puede llegar a facturar un millón de euros por el aprovechamiento de unos pinares por los que, hasta 2017, sólo había pagado entre 30.000 y 50.000 euros anuales. En 2017, la empresa ha abonado 123.000 euros, de los que obtendrá, según datos de la propia empresa, 580.000 kilos de piña, que “se transformarán en más de 11.000 kilos de piñón pelado». Esta producción puede alcanzar un valor de mercado cercano al millón de euros.
Los vastos pinares de Cartaya no sólo constituyen una de las señas de identidad y el escenario del acervo histórico y etnogtáfico cartayeros, sino un ecosistema con las condiciones idóneas para el desarrollo de una sólida economía verde a través del aprovechamiento del piñón. IU defiende que “el aprovechamiento y la conservación de los campos comunes de Cartaya, en cooperación con los sectores productivos tradicionales, constituye una valiosa oportunidad para generar progreso y riqueza, creando empleo estable y de calidad”.