Redacción. Los deportistas de élite son conscientes de que la única herramienta que poseen para alcanzar la gloria es su cuerpo y, a pesar de que lo someten en ocasiones a esfuerzos inhumanos, tratan de prevenir enfermedades y lesiones con una estrategia de prevención activa. Este es el caso de Emilio Martín, que recientemente acaba de ganar el título de campeón de Europa de Duatlón, único reconocimiento que le faltaba tras haber sido ya ganador en dos ocasiones del mundo y otras tantas de España.
Ahora Emilio, para estar en perfecto estado a lo largo del año, se somete a diversos controles médicos que consisten en análisis de sangre y exploraciones físicas para detectar patologías, sucesos cardiacos y arritmias, además de otras pruebas que localizan cualquier anomalía que ponga en peligro su vida. Todo ello porque hay que ser conscientes de que el deporte siempre se practica para mejorar la salud, y nunca para perjudicarla.
El corazón, el motor de un deportista. Al año fallecen 45 personas practicando deporte a causa de la muerte súbita. Estos datos preocupan tanto a profesionales como a atletas, dando como resultado un cambio en las políticas sanitarias enfocadas a una mayor prevención y control de estas patologías. Para ello hay dos pruebas fundamentales que todo deportista de élite realiza frecuentemente: la ecocardiografía y la prueba de esfuerzo.
“La ecocardiografía se basa en el estudio morfológico y funcional del corazón, y es la que detecta la mayor parte de las anomalías que llegan a la muerte súbita por debajo de los 30 años”, aclara el Dr. Juan Motero, cardiólogo de la clínica HLA Los Naranjos, quien añade que “a partir de los 30, la causa más frecuente de esta clase de defunción son las enfermedades coronarias, por lo tanto, por encima de la treintena, las pruebas de esfuerzo, que son las que se utilizan para detectar estas patologías, se convierten en indispensables. Secundariamente a estos controles, también hay otros más específicas como el monitor Holter, que se realiza en caso de que se presente algún tipo de arritmia”.
Sin embargo, no es necesario practicar deporte de forma intensa para tener necesidad de un control médico preventivo. Los expertos advierten que el deportista amateur debería someterse a controles diagnósticos una vez al año, sobre todo, cuando empieza a practicar deporte de forma regular. En cambio, el deportista de élite depende de controles más periódicos que varían según la temporada que haga y de las curvas de preparación física que tenga.
Es importante realizar estos exámenes médicos porque antes de poner a prueba al corazón, hay que saber si está preparado para el esfuerzo al que se le va a someter. “Tampoco podemos obviar que este órgano es la principal diferencia entre un atleta y el deportista amateur, porque el que practica deporte de manera profesional o de forma muy asidua, sufre una serie de adaptaciones, como el aumento de las cavidades cardíacas, por lo que el profesional puede rendir más. En cambio, si una persona que no es deportista de élite presenta estas anomalías, es señal de que algo malo está ocurriendo”, detalla el cardiólogo.
La preparación física, la mejor prevención para las lesiones. Emilio Martín realiza, de media, entre 12 y 15 competiciones al año, y para seguir este ritmo precisa de un equipo médico y de entrenadores que le ayuden a mantener una buena preparación física, factor indispensable para prevenir las lesiones.
Sin embargo, no todas las lesiones se pueden prevenir. El talón de Aquiles de Emilio es el síndrome de la cintilla iliotibial, comúnmente llamado la «Rodilla del corredor», su lesión más recurrente durante su carrera deportiva.
“El tratamiento para la curación de esta lesión cada vez es distinto y depende de la causa. En unas ocasiones con que el fisioterapeuta descargue la pierna en suficiente, en otras ocasiones es necesario pinchar y en ocasiones más difíciles, realizar técnicas como la aplicación deultrasonidos”, explica el deportista. Además de estas dolencias, tal como nos indicael Dr. José Luís Mendoza, traumatólogo de HLA Los Naranjos, las contusiones más comunes para un deportista de duatlón y triatlón son la tendinitis por sobreesfuerzo, torceduras de tobillo o rotura de fibras. Y ante estas situaciones, con fisioterapia, rehabilitación y tratamiento médico se pueden solucionar todo tipo de dolencias.
Emilio Martín confía estos controles médicos a HLA Los Naranjos al disponer de los últimos avances para tratar cualquier patología, como la magnoterapia, la cual acorta los tiempos de recuperación y es adecuada para acelerar las fracturas. Además de los tratamientos de electrofisiología que aceleran la cicatrización de lesiones musculares y de otra serie de contusiones. Todos estos avances ayudan a los deportistas, como el campeón europeo de duatlón, a que su curación sea más rápida para poder seguir con su carrera profesional.