S. D. Nozomi Okuhara se puede considerar la ‘bestia negra’ de Carolina Marín, a quien ha ganado cinco de sus últimos cinco enfrentamientos, el último este viernes en Glasgow, donde la onubense ha dicho adiós al Mundial y, por ende, a su sueño de revalidar por tercera vez consecutiva dicho cetro.
Partido durísimo que se alargó 93 minutos, en el que la japonesa acabó por superar a una Carolina que, tras dos primeros encuentros excelsos, eso sí ante jugadoras de menos nivel, había cogido mucha moral para encarar esa empresa de volver a ceñirse la corona mundial. No pudo ser. Por 18-21, 21-14 y 14-21, la nipona se interpuso otra vez en el camino de la de Huelva que, además de tener que enfrentarse a una jugadora de enorme nivel, tuvo demasiados errores en las dos mangas.
Ya el inicio del primer set fue revelador. Un 4-11 de parcial al intervalo para la asiática dejó claro cómo se iban a desarrollar los acontecimientos. Cierto es que a la vuelta del intervalo, Carolina Marín desplegó su mejor repertorio, llegando incluso a colocarse a un solo punto de la japonesa (18-19). Pero esa reacción fue insuficiente, ya que de nuevo dos errores en ese tramo final condenaron a la de Huelva a la pérdida del set: 18-21.
Un halo de esperanza llegó en la segunda manga, y eso que comenzó también con malas sensaciones. Un parcial de 2-5 en favor de Okuhara encendieron las alarmas en la onubense que, a duras penas, alternando aciertos y errores, llegó con desventaja casi mínima al intervalo (9-11). La buena racha de Carolina le proporcionó el empate a 12, desde donde cimentó la que iba a ser su racha más demoledora y definitiva. Un 5-0 de parcial volteó el set en su favor (17-12), cerrándose la manga con un claro 21-14, lo que venía a significar un contundente 12-3 de parcial desde el intervalo.
En el set definitivo, la igualdad y el equilibrio se mantuvo hasta el empate a 14. Fueron dos partidos en uno. Hasta ese instante, aunque la japonesa tuvo mayores rentas, nunca superando los tres puntos eso sí (8-11 al descanso), el partido estaba muy igualado en espera de un parcial de alguna de las dos que lo decantase a su favor. Lamentablemente ese parcial llegó para la japonesa (0-5), que le dejó con 14-19 el camino expedito hacia la victoria, que llegaría poco después al firmar el triunfo en la manga y en el partido por 15-21.