Mari Paz Díaz. La ciudad romana de Pompeya sigue siendo uno de los lugares más llamativos del mundo. Desde su descubrimiento en el siglo XVIII, sus ruinas reciben cada año miles de visitantes, atraídos por ver los restos de una ciudad que quedó parada en el tiempo en el año 79 d. C., tras ser sepultada por la lava provocada por la erupción del Vesubio. Quizás pocos sepan que Carlos III de España, entonces rey de Nápoles, fue el que encargó a un ingeniero militar español, a Roque Joaquín de Alcubierre, el inicio de las excavaciones. Aquellos trabajos permitieron el comienzo de la recuperación de una ciudad romana completa y conocer cómo era la vida cotidiana de los romanos.
Desde aquellos primeros trabajos arqueológicos, son muchos los investigadores y estudiosos que se han acercado a desenterrar y estudiar los restos de esta bella ciudad romana, que recibe cada año la visita de unos dos millones de personas. Al mismo tiempo, la indagación de datos continúa con la presencia de diversos grupos de investigación en la zona, que continúan intentando desgranar todas las claves de este mítico lugar.
Precisamente, una joven onubense, la historiadora Noemí Raposo Gutiérrez, acaba de finalizar su tesis doctoral sobre ‘La delimitación de los espacios públicos en Pompeya’, que le ha permitido estudiar in situ las ruinas de esta ciudad romana para indagar en un aspecto inédito del yacimiento. La investigación, presentada el pasado 26 de junio en la Facultad de Geografía e Historia de la Universidad Complutense de Madrid, ha obtenido la calificación de Sobresaliente Cum Laude.
Un reconocimiento con el que esta ya Doctora en Historia ha visto cumplido un sueño después de una intensa carrera. En concreto, Noemí Raposo, de 29 años, se licenció en Historia en la Universidad de Huelva en el año 2011, obteniendo el Premio Extraordinario al Mejor Expediente. Al año siguiente, decidió realizar el Máster de Arqueología del Mediterráneo en la Antigüedad Clásica en la Universidad Complutense de Madrid, a través del cual ha llevado a cabo durante los últimos cuatro años la tesis doctoral a distancia desde Huelva, realizando varias estancias de investigación en Pompeya para la recogida de datos y una estancia de tres meses en La Università di Bologna (Italia), con la finalidad de hacer el doctorado con Mención Europeo. Un interesante estudio que ha querido presentarnos en esta entrevista, donde desvela las claves de su tesis doctoral, al tiempo que analiza cómo le gustaría que fuera su futuro profesional.
-Noemí, acabas de presentar la tesis doctoral, que ha estado dirigida por los doctores José María de Francisco Olmos y José María Luzón Nogué. ¿Cuál ha sido el objeto de estudio de este trabajo?
-He investigado la delimitación de todos los espacios públicos en Pompeya, donde incluyo las calles y sus aceras y los edificios de ocio, así como los espacios sagrados, los defensivos y los religiosos. Pero, el grueso de la tesis, se centra en ver cómo se delimitaban las aceras de la ciudad de Pompeya y analizar si los ciudadanos cumplían o no la normativa urbana de ocupación de espacios públicos, ya que, a veces, esta norma se quebrantaba y algunos ciudadanos invadían las aceras con sus propiedades.
-¿Cuáles son las principales conclusiones de la investigación?
-La conclusión a la que he llegado precisamente es que los ciudadanos de Pompeya, en ocasiones, ocupaban los espacios públicos de la ciudad, como ocurría con las aceras, con la construcción de edificios sobre éstas, estableciendo escalones de acceso a las propiedades o colocando servicios de uso público, como fuentes de agua, que impedían el tránsito peatonal. Eso sí, estas prácticas no eran la tónica general en la ciudad, puesto que la mayoría de los ciudadanos cumplía la normativa urbana de ocupación de espacios y no invadía las aceras.
-¿Qué interés tienen las evidencias que has conseguido?
-Es una cuestión novedosa. Hay muy pocos estudios sobre este tema de investigación. Solo se encuentran algunos artículos sobre la delimitación de algunas calles de la ciudad de Pompeya, pero no existen monografías que incluyan toda la ciudad, como se ha pretendido realizar con esta tesis doctoral.
-A partir de aquí, ¿qué aplicaciones tiene esta memoria?
-Pretende llenar el vacío que hasta ahora existe sobre este ámbito del urbanismo romano. Además, ahora, podemos contar con un trabajo monográfico sobre la delimitación de espacios públicos en la ciudad de Pompeya, que nos puede permitir hacer comparaciones y estudiar estos espacios en otras ciudades romanas con características similares a Pompeya, como, por ejemplo, la vecina ciudad de Herculano u Ostia Antica en Roma. O, incluso, si nos trasladamos a la Península Ibérica podemos compararla con Itálica, Baelo Claudia, etcétera.
-¿Cómo surgió tu interés por este tema tan sugerente?
-Fue con motivo del Trabajo Fin de Máster. Yo quería un tema sobre el urbanismo romano y el profesor José María Luzón Nogué me propuso estudiar las aceras de Pompeya, que era un ámbito que aún no estaba estudiado. Me pareció muy original, así que acepté y seguí la investigación con la tesis doctoral, ya que era una cuestión muy amplia para abordarla en un Trabajo Fin de Máster.
-¿Quiénes han formado parte del tribunal de tesis?
-La Dr. Fabiola Salcedo Garcés, el Dr. Jorge García Sánchez, la Dr. Irene Mañas Romero, la Dr. Macarena Bustamante Álvarez y el Dr. Massimo Osanna Soprintendente di Pompei, ya que he realizado el doctorado con Mención Europeo.
-¿Qué han valorado de tu trabajo?
-Han valorado sobre todo la originalidad, al tratarse de un tema inédito, por lo que han considerado que es una gran aportación para los estudios de urbanismo romano. La nota que me ha puesto el tribunal ha sido Sobresaliente Cum Laude.
-¿Qué ha supuesto para ti presentar esta tesis en la Universidad Complutense?
-Cumplir un sueño que siempre he tenido. Desde que comencé la carrera siempre me puse la meta de ser doctora y, ahora, siento que al fin lo he cumplido. Me siento feliz.
-¿Tienes previsto publicarla?
-Sí, tengo pensada publicarla. Además, voy a continuar con el tema de investigación haciendo una serie de estudios en distintas ciudades, como las que he comentado anteriormente de Herculano, Ostia Antica, Roma, Itálica o Baelo Claudia, entre otras, para compararlas con Pompeya.
-¿Qué estás haciendo en la actualidad?
-Compagino la investigación del urbanismo de las ciudades romanas con mi participación en la elaboración del Expediente de Bien de Interés Cultural de las Minas de Cumbre de las Herrerías y Cabezas del Pasto en Puebla de Guzmán, ya que soy miembro de la Asociación Herrerías, que participa en la elaboración de dicho expediente con la Delegación de Cultura.
-¿Cuál es tu idea de cara al futuro? ¿Cómo te lo planteas?
-Aparte de continuar con la investigación en otras ciudades del Imperio Romano, mi idea es obtener la acreditación para poder ejercer como profesora de universidad, por lo que pienso seguir con la línea de investigación. Además, estoy en la junta directiva de una asociación que se está creando para realizar actividades sobre patrimonio en la provincia de Huelva, que en unos días se dará a conocer.
-¿Algún mensaje a los jóvenes universitarios onubenses?
-Pues les animo a que sean constantes en sus estudios, pues, con constancia y dedicación, se puede conseguir todo lo que uno se proponga.