Redacción. Con la Misa de Mayordomos que se celebró en la ermita de Montemayor en la tarde de este lunes 13 de mayo se despedían los moguereños de su Patrona después de disfrutar de una Romería más íntima, marcada por la estrecha convivencia entre las Hermandades Filiales.
La Romería de Moguer se inició en la tarde de pasado viernes con el multicolor desfile de peregrinos, caballistas y carretas, que entre cantes y palmas, recorrieron los dos kilómetros que separan el casco urbano del bello paraje natural en el que se desarrolla esta celebración.
A partir de ese momento la alegría y la devoción invadieron cada uno de los rincones del recinto romero, donde vecinos y visitantes disfrutaron de la hospitalidad de esta tierra, especialmente en la Casa de Mayordomos, que registró desde el primer al último día un gran ambiente festivo y de camaradería.
Uno de los actos más brillantes y coloristas se vivió en la mañana del sábado con la presentación oficial de las Filiales de Sevilla, Huelva, Punta Umbría, Madrid, Arahal, Campofrio-Dehesa de Riotinto y Lucena del Puerto, que fueron recibidas en el pórtico de la ermita por la Hermandad Matriz, junto a varios miembros de la Corporación Local encabezados por el alcalde Gustavo Cuéllar y una representación de las casi 40 personas que han ostentado este año el cargo de la mayordomía, conocidos como la familia de ‘La Liebre’. Este grupo de moguereños y moguereñas han contribuido con su generosidad y entrega a engrandecer una celebración que este año ha registrado una menor afluencia de público, motivado en parte por la delicada situación económica por la que atraviesan muchas familias de la localidad.
Es importante destacar de este acto de presentación, que por primera vez la Hermandad de Arahal ha hecho su entrada con un carretón donado por la Filial de Villamanrique que, por motivos familiares, lleva varios años sin acudir a su cita anual con María de Montemayor.
Precisamente algunos de los momentos más emotivos de esta Romería se han vivido con el hijo del fundador de la Hermandad de Villamanrique, Juan Márquez, que acudió a la cita invitado por Arahal junto a su familia.
Ya por la tarde se celebró de forma conjunta, y por segundo año consecutivo, la Misa de las Filiales, una decisión adoptada por la Junta Directiva que preside Joaquín Luis Domínguez que ha contribuido a hacer más sentido y emotivo este momento; como emotivo y mágico fue el espectacular rosario de antorchas que iluminó el recinto en la madrugada del sábado.
El programa de cultos de la Matriz continuó el domingo, día grande de la Romería, con la celebración de la multitudinaria Función Principal presidida por el párroco José Manuel Raposo y concelebrada por los capellanes de las Filiales, así como por sacerdotes moguereños o vinculados estrechamente a Moguer como el caso del ex-párroco Manuel Castilla.
La misa estuvo cantada por el resurgido grupo Orujo, cuyos componentes Rafael Moreno, José Antonio Gómez ‘Garrío’, Rafael Reyes y Álvaro Burgos, contaron para esta ocasión tan especial con la colaboración de Lorena Fradejas, Monte Gómez y Mari Ángeles Cruzado.
Con la celebración del oficio religioso se iniciaba la cuenta atrás hacia el momento más esperado de la Romería de Moguer, la salida en procesión de su Patrona. Unos minutos antes de las seis de la tarde los costaleros saltaban las rejas para alzar en hombros a su Patrona entre una multitud de moguereños que se agolpaban en el interior del templo. La primera parada, como no, en la Casa de los Mayordomos, donde se vivieron momentos especialmente emotivos cuando entre lágrimas le cantaron a la Virgen unas sevillanas compuestas para la ocasión por Antonio Rodríguez ‘Caballero’.
Las letras alusivas a la Patrona de Moguer no cesaron durante las más de cinco horas de recorrido; especialmente aplaudidas fueron las del conocido grupo onubense Manguara, que por primera vez le cantó a la Señora de Moguer en la Casa de los Mayordomos; las del grupo Orujo, o las siempre esperadas de Laura Garrido, que junto a otros muchos moguereños y moguereñas regalaron la grandeza de su voz a su Patrona.
En este emotivo recorrido la Virgen visitó las siete Hermandades Filiales que con gran esfuerzo e ilusión acuden cada año a su cita anual con Nuestra Señora de Montemayor, demostrando una vez más la fe que despierta esta advocación mariana fuera de la localidad.
Uno de los momentos más recordados de la procesión de 2013 será sin duda el que se vivió durante al paso de la Virgen por el lugar que ocupaba tradicionalmente la Hermandad de Villamanrique, donde el hijo del fundador de la Filial sevillana recibió entre lágrimas a la Patrona de Moguer arropado por el resto de Filiales y por la Matriz.
La Señora de la ciudad regresó a la ermita alrededor de las once de la noche siempre custodiada por sus costaleros, y entre una multitud de fieles que la acompañaron en este bello recorrido entre pinares y chaparros.
Tras disfrutar de estos mágicos momentos, el lunes por la tarde los romeros y romeras comenzaron a organizar la recogida de enseres para iniciar el camino de regreso a Moguer.
A las 18.00 horas tuvo lugar la siempre emotiva misa de Mayordomos, donde se realizó el cambio de varas entre los mayordomos salientes y los que desempeñarán este cargo en la romería 2014, Luis Alberto González ‘El Golpe’, junto a su mujer y sus hijos; una responsabilidad que les permitirá disfrutar junto a otros miembros de su familia de una de las experiencias más bonitas e inolvidables que puede vivir un moguereño.
Por último destacar que las infraestructuras y servicios municipales funcionaron normalmente en una romería marcada por la ausencia de incidentes reseñables y cargada de momentos inolvidables para todos.
Visita nuestra galería fotográfica con las imágenes de la Romería de Moguer 2013.