P. G. El gol de Arana tuvo un gran valor. Con el Murcia ganando y metiendo presión, el triunfo ante el Guadalajara se antojaba necesario para afrontar el tramo final de la Liga sin miedos, ni zozobras. Lo consiguió. Sin hacer el «partidazo» que sí vio su entrenador, Sergi Barjuan, pero siendo lo más eficaz posible ante la meta de Razak, el Decano ganó la ‘final’, sumó los 48 puntos, uno más que en toda la temporada pasada en la que se salvó por un suspiro.
El Recre gana tranquilidad. Es lo que necesitaba. El primer equipo de Sergi ha cumplido con el objetivo prioritario encomendado: la permanencia. No es matemática, pero con los 48 puntos en el zurrón sí es de ‘facto’. El Decano puede, a partir de ahora, jugar con la serenidad necesario al saberse un año más en Segunda A, condición indispensable para no quitarle la razón al secretario técnico, Fernando Iturbe, que en una entrevista a la web del club confesó que «en la temporada próxima se peleará por el ascenso a Primera».
Con la permanencia en el bolsillo, a falta de que los números ya lo confirmen, el Recre encarará el tramo final de la competición con la sana intención de subir peldaños en la tabla y acabar lo más arriba posible. Tres partidos fuera de casa. Ponferradina, UD Las Palmas y Sporting, y otros tres al amparo de su afición -que por cierto cada vez acude menos al Colombino-, Hércules, Córdoba y Huesca, es el calendario que le resta al Decano, y en el que puede sumar un buen número de puntos para zanjar esta primera campaña de Sergi Barjuan en la zona templada de la clasificación, alejado de los sobresaltos de la temporada anterior en la que se rozó lo que nadie hubiera deseado, el descenso.
