Redacción. Almonte ha cumplido el sueño de muchas personas relacionadas con la donación de órganos y ha dedicado una plaza a este enorme gesto de generosidad en la proximidad del Centro de Salud. La iniciativa es una respuesta a vecinos de la localidad pertenecientes a la asociación de trasplantados, quienes habían hecho esta solicitud al ayuntamiento desde hacía años, recibiendo respuesta con esta Plaza del Donante de Órganos. Más de cuatrocientas personas, cien de ellas trasplantadas, se dieron cita en los actos organizados en la localidad, que se iniciaron con una misa ante la Virgen del Rocío en la Parroquia de la Asunción y prosiguió con el acto que dio sentido a la celebración.
Participaron en este homenaje , junto a los familiares, miembros de asociaciones y equipos médicos relacionados con la donación, y vecinos y miembros de la corporación municipal. También formó parte del acto una amplia representación de la Hermandad Matriz de Almonte. El alcalde, José Antonio Domínguez, agradeció su esfuerzo a la asociación andaluza de Trasplantados Hepáticos y al concejal José Joaquín de la Torre, “por su tenacidad a partir del compromiso adquirido con los miembros del colectivo”, y al trasplantado Alonso Saavedra “por su tesón, junto a la labor infatigable de los equipos médicos”.Domínguez añadió que «estamos de enhorabuena por inaugurar la primera plaza de la provincia sobre este tema”.
Por otra parte, y según detalló la concejala de Salud Rocío López, “desde el principio de esta legislatura, este equipo de gobierno ha acogido esta idea desde nuestro compromiso con la sociedad, y con todos aquellos que nos dan a diario ejemplos de lucha, superación, esperanza, honestidad y profesionalidad. Valores que se ponen de manifiesto en la donación de órganos”. La titular de Salud expresó la intención de que estos gestos calen con más fuerza aún en la sociedad, “ya que todos podemos vernos en una u otra situación, como donantes o receptores”.
El doctor José Pérez Bernal, de la Unidad de Coordinación de Trasplantes, destacó la importancia de este acto celebrado “a favor una causa tan solidaria como esta, que permite a muchas personas volver a nacer”. Manuel Muñoz, en nombre de los donantes y sus familiares, quiso recordar a su hijo, fallecido hace seis años y medio. Según relató, “mediante aquel acto, no murió, puesto que hoy hay siete personas que se salvaron”. Por ello, pidió a todos solidaridad con aquellas personas que esperan un órgano para seguir viviendo, “porque cuando un familiar se va, ya no vuelve, pero es una gran satisfacción compartir la felicidad que sienten las personas trasplantadas, gracias a un gesto de generosidad realizado a tiempo”.