Redacción. Se trata de la XVIII edición ya que se realizó por primera vez en 1999 en iglesia conventual Santa María de Gracia (RR.MM. Agustinas) a petición de la Tertulia Cofrade Universitaria. En estos años la coral y los músicos que la acompañan han recorrido muchos templos y teatros con este concierto y otros conciertos temáticos de similar índole, los más exitosos en Granada, Sevilla o Cáceres.
Es una llamada a reflexionar, con textos y música sacra. Es un recorrido lírico de los últimos días de Jesús en la tierra, haciendo especial hincapié en los momentos de la Pasión y Muerte de Cristo, donde la música sacra y la narración nos transportarán a lo más profundo de nuestro sentir cristiano.
Compartir la vida eterna y cantar tus alabanzas, …así decimos al acabar la plegaria eucarística.
Y no es ésta la única vez en que, para expresar de algún modo la realidad inefable de la vida celestial que esperamos, se echa mano del canto o la música.
Cantar las alabanzas del Señor, proclamar cantando sus maravillas, es actividad principal de los ángeles y bienaventurados en el cielo: fuente y manifestación de su gozo.
Por eso la liturgia cristiana en continuidad con la judía, siempre cantó y se acompañó de instrumentos musicales ya que la celebración litúrgica en el cielo que esperamos se nos hace presente y se nos anticipa.
No en vano se nos recuerda que celebramos cantando con los ángeles y los arcángeles y con todos los coros celestiales y reunidos en comunión con toda la iglesia veneramos la memoria de la Virgen María y todos los Santos cantando.
Por ello, la música litúrgica también se llama Música Sagrada, y se puede definir con palabras del Concilio
Vaticano II: “Se entiende por Música Sagrada aquella que, creada para la celebración del culto divino, posee las
cualidades de santidad y de perfección de formas. Con el nombre de Música Sagrada se designa el Canto
Gregoriano, la Polifonía Sagrada antigua y moderna de los distintos géneros, la Música Sagrada para órgano y
para otros instrumentos admitidos y el Canto Sagrado popular, litúrgico y religioso”.
En este concierto vamos a escuchar piezas que cuentan en su construcción con una gran belleza expresiva y severidad de interpretación, todo esto en las voces de la Coral Sagrada Cena arropadas con textos bíblicos de la Pasión y otros del Vía Crucis Cofrade, y con el acompañamiento instrumental de órgano y piano en las manos y el sentimiento de Carlos Sánchez de la Campa y Carolina Muñoz al violín, jóvenes formados en la sensibilidad para la música litúrgica.