S. D. En la madrugada de este miércoles se va a producir el debut de Carolina Marín en el Open de China, último Superseries Premier del año, al que llega después de no haber podido jugar en Francia, y con la mente puesta ya en las finales de los Superseries en Dubai en diciembre.
La jugadora local Ji Shuting será la primera rival de la onubense que buscará el primer triunfo de la temporada en este tipo de eventos -el de mayor nivel de bádminton-, y que por ahora le ha sido esquivo.
Las japonesas Okuhara y Yamaguchi, en las semifinales de Inglaterra y Dinamarca, y la china Wang Yihan, en los cuartos de Malasia y las semifinales de Indonesia, han privado hasta el momento a la onubense de colgarse el oro en un Superseries Premier en una temporada en la que, ahí es nada, Carolina sí ha subido a lo más alto del podio en el Campeonato de Europa y en los Juegos Olímpicos.
El Haixia Olympic Sports Center de Fuzhou va a ser el escenario donde la onubense intente ganar un torneo que, por ahora, se le resiste, si bien es una incógnita saber cómo va a responder después de la lesión que se le produjo en Odense, y que le privó de jugar el Open de Francia, torneo de menor rango que éste, pero que Carolina tenía muchas ganas de disputar.
La participación de Carolina en este evento en China va a impedir que pueda recoger la Medalla de Oro de la Real Orden al Mérito Deportivo 2016, que se le ha concedido junto a otros importantes deportistas españoles.