HBN. Treinta años de experiencia lo avalan como oftalmólogo. ¿La clave para llegar a atesorar y mantener su prestigio? “Decir siempre la verdad. El paciente tiene que saber siempre la verdad. En esta profesión la sinceridad tiene que estar por delante en todo”. Así de contundente se expresa el Dr. Rafael Gil Piña, quien en la actualidad compagina el trabajo en la Clínica Oftalmológica Gil Piña con su puesto como jefe del Servicio de Oftalmología en el Hospital Costa de la Luz de la capital onubense. “Se cumple así uno de sus sueños: el de dirigir a un equipo de Oftalmología”, apostilla durante la entrevista el hijo de Rafael Gil Piña.
A la capital onubense llegó en 1983. Tras instalarse previamente en una pequeña consulta en la Plaza de las Monjas donde permanecería durante tres años, la necesidad por incorporar nuevos equipos tecnológicos unido al incremento del número de pacientes le hizo buscar un nuevo emplazamiento, llegando así a ubicarse durante unos siete años en la Placeta. Fue ya en 1998 cuando de forma definitiva instaló su consulta en Pablo Rada 6, 2ºB donde sigue atendiendo consultas en la actualidad. “Ha sido una evolución muy natural desde un pequeña consulta a una clínica, que es en lo que se ha convertido ahora puesto que trabajo junto a otros siete oftalmólogos”, explica el Dr. Gil Piña.Malagueño de nacimiento –de Marbella concretamente- el doctor reconoce que fue un familiar cercano, un primo suyo mayor que él que ejercía en Málaga como médico, quien supo despertar en su persona el interés y la vocación por una profesión, la Medicina y, especialmente la Oftalmología, que ha modelado su vida.
Decir siempre la verdad como señala el propio profesional médico ha podido ser clave en el crecimiento constante de su clínica, pero también es esencial tener en cuenta la continua apuesta por la formación -el equipo tiene presencia en todo tipo de Congresos celebrados en el plano internacional- y el hecho de haber acertado rodeándose de excelentes socios y compañeros. En la actualidad el Dr. Gil Piña trabaja junto a siete profesionales: Manuel Cobos, Juan Mora, Francisco Barral, Juan Iglesias, Miguel Contreras, Miguel Ángel Díaz y Belén Domínguez. Cada uno de ellos es experto en un área, lo que convierte a la clínica Gil Piña en el único centro privado en Huelva capacitado para atender cualquier tipo atención relacionada con la Oftalmología sin necesidad de desplazarse a Sevilla.
En esta línea, el Dr. Gil Piña destaca el hecho de que actualmente lo que les define y diferencia es “el tener de todo”. “Somos una clínica -añade- que tenemos todos los medios que hacen falta para diagnosticar cualquier tipo de enfermedad ocular, y con tecnología avanzada para actividad tanto diagnóstica como quirúrgica”. El equipamiento con el que trabajan incluye desde el Pentacam -tomógrafo que toma imágenes tridimensionales de la parte anterior del ojo, incluyendo la cornea, el iris, el ángulo de la cámara anterior y una porción del cristalino-hasta OCT, Láser Argón y YAG, IOL-Master, tecnología de vanguardia para el tratamiento de patologías de retina y glaucomas. Además, anuncia el Dr. Gil Piña, esperan contar pronto con el láser Femtosegundo, herramienta que aporta seguridad y precisión en determinadas técnicas quirúrgicas, empleándose en cirugía corneal, cirugía de la catarata, trasplantes de córnea y cirugía refractiva.
Entre los retos de la Clínica Gil Piña destaca el de unificar próximamente todos los servicios que actualmente prestan en el Hospital Costa de la Luz, donde el Dr. Gil Piña ya es jefe del Servicio de Oftalmología en el Hospital Costa de la Luz. Hasta que ese momento llege, el oftalmólogo seguirá atentiendo también a los pacientes en su consulta en Pablo Rada 6, 2ºB.
