P. G. Berrocal, Marco Navas y Riolfo son las novedades que presenta la convocatoria del Recreativo de Huelva para el partido del viernes (Nova Creu Alta, 21:00) ante el Sabadell. Estos jugadores vienen a suplir las vacantes que dejan Morcillo, sancionado por la doble tarjeta amarilla que vio frente al Castilla, y de Puigdollers y de Brozek, lesionado de última hora.
La convocatoria completa para este encuentro es la siguiente: Alejandro y Cabrero, porteros; Córcoles, Manolo Martínez, Zamora, Ruymán y Fernando Vega, defensas; Matamala, Borja Granero, Jesús Rubio, Jonathan Valle, Marco Navas y Riolfo, centrocampistas; Alexander, Berrocal, Chuli, Arana y Francis Ferrón, delanteros.
Sergi Barjuan va a tener que trastocar su idea inicial para el partido con el equipo arlequinado. Sobre todo por la baja de Puigdollers, ya que como reconoció el propio técnico en la rueda de prensa previa al partido, había ensayado durante la semana con el jugador catalán en el once. El entrenador, de todos modos, restó importancia al tema, indicando que todos los jugadores disponibles pueden jugar y hacerlo bien.
Dadas las múltiples ausencia que presenta el Recre para este partido, Sergi va a tener que trastocar el equipo. Más problemas tiene para confeccionar la medular, en la que tres jugadores de una misma posición -el mencionado Puigdollers, Dimas y Montoro- son bajas. Excluido por lo tanto un trivote más defensivo, Sergi tiene problemas, incluso, para colocar dos mediocentros, ya que sólo cuenta con uno específico: Matamala. Por lo tanto tendrá que improvisar un acompañante del catalán, que bien pueden ser Borja Granero, el que más se puede acoplar a esa posición, o incluso Manolo Martínez, un central que ya ha jugado varias veces en esa posición.
El caso es que si Manolo Martínez se incorpora a la medular, Sergi tendrá que hacer cambios en la defensa, ya que centrales sólo viajan dos, el alicantino y Zamora. En ese caso Ruymán tendría que jugar en el centro, dejando el lateral zurdo para Fernando Vega.
Berrocal, entre las ganas de revancha ante el Sabadell y la tranquilidad por amarrar la permanencia