Miguel Mojarro. En un ya distante 2008, el Grupo Azoteas iniciaba su trabajo de investigación en el atractivo mundo de los Casinos de Huelva. Lo que comenzó siendo un trabajo para reportajes, se ha convertido en libros y artículos varios sobre salones, hombres y asuetos.
Hoy, ocho años después, un peligro amenaza a los casinos de Huelva, esos templos del Ocio y lugar de encuentro con la Cultura: La exigencia de unos tiempos que han modificado profundamente la sociedad que creó los casinos.
Por eso, junto a tres casinos que son emblemáticos en esta lucha por la adaptación, hemos creado una asociación con objetivos claros en la dirección que nos marcan la necesidad de los casinos de Huelva. Tres casinos con particulares y peculiares problemas de identidad:
La cultura como identidad histórica, el carácter minero de su espacio y los socios como referentes del trabajo directivo.
• Corrales, el Casino Minero que está recuperando su esencia y su historia, a orillas de una ría que en otros tiempos fue joya de la minería del Andévalo.
• Gibraleón, el Círculo de Labradores y Artesanos, que desarrolla el principio de que los esfuerzos del Casino deben ir encaminados al confort (Físico y cultural) de los socios. No tienen herederos a quienes dejar protegidos.
• Nerva, la histórica Sociedad Centro Cultural, que ha sabido salir de una situación crítica y está navegando hacia la recuperación de su pasado cultural.
• Y Azoteas, un Grupo que tiene a los Casinos de Huelva como referente de su trabajo sociológico en el Sur.
Asociación Casinos de Huelva, nombre que define por sí sólo el destino de sus afanes.
Y con objetivos que son guía para su futura actuación. Esto dice su Estatuto:
1. Cooperar con los Casinos de Huelva en sus actividades de ocio, relaciones entre casinos, difusión de actividades culturales y divulgación de patrimonios locales y provinciales.
2. Servir de vínculo entre los diferentes casinos, en lo que nos sea requerido para el conocimiento mutuo de propuestas, actividades y valores.
3. Desarrollar el sentimiento «casinero», como valor social de relaciones locales, al servicio de un ocio, que contemple diversas sensibilidades para el tiempo de asueto.
4. Proponer ideas en aquellas situaciones que percibamos como adecuadas para enriquecer las propias de cada casino.
5. Tener como permanente actividad la destinada a apoyar a los casinos de Huelva, en los dos problemas fundamentales que pueden surgir en el momento actual:
• Evitar la desaparición, que ha sido triste realidad en los últimos años.
• Potenciar la adaptación a las nuevas necesidades ante una sociedad evolucionada.
Cuarenta y cinco casinos. Así reza el título del libro que Azoteas publicó sobre esta riqueza social de los pueblos de Huelva. Cuarenta y cinco casinos, que “fueron”, porque hoy han desaparecido algunos de ellos. Es la tendencia lógica en estas instituciones, porque los gastos permanecen mientras los ingresos disminuyen, a causa de las bajas naturales de los socios de edad avanzada y la escasa incorporación de nuevos miembros de edades juveniles.
Es lógica esta ausencia, porque las generaciones nuevas son hijas de otras inquietudes y nuevas ofertas para el asueto. Lógico e inevitable con los medios sencillos de que disponen los casinos. La adaptación es necesaria, imprescindible y obligada. Necesaria para sobrevivir, imprescindible porque es el único recurso y obligada para los dirigentes que tienen como primera obligación tal adaptación.
Como han entendido los presidentes de Corrales, Gibraleón y Nerva en sus afanes diferentes y compartidos. Casinos que han plantado cara a la apatía suicida y han abierto las puertas a una adaptación que es la única medicina adecuada.
Han tomado la mano de la Cultura, como deseable compañera de un viaje que, para ellos, tendrá la recompensa que la Historia de los casinos reconocerá.
Para eso nace la Asociación Casinos de Huelva, para armonizar y colaborar en la rebelión “casinera”, ante una muerte anunciada, a corto o medio plazo, porque los casinos de Huelva ya no están inmersos en una sociedad como la del siglo XIX y primera mitad del XX.
La lucha de los casinos no debe ser deslavazada ni inconexa, sino que es conveniente una entidad que armonice sus esfuerzos y organice los caminos. Por eso la Asociación Casinos de Huelva. Por eso y para eso.
Los Casinos de todas las zonas de Huelva, tendrán en sus manos las decisiones y las acciones. Una primera Directiva, en la que se integran socios de Andévalo, Sierra y Condado, tomarán en septiembre las riendas para iniciar el camino marcado por el Estatuto.
Trigueros, Puebla de Guzmán, Aracena, Rociana … , serán en septiembre líderes de una tarea importante en la historia de los pueblos de Huelva.
Mientras tanto, una Junta de Fundadores completará su tarea de creación y divulgación de la Asociación Casinos de Huelva, primera asociación de este carácter. Para ello, ya anunciamos una serie de actos en los que pondremos cara a las intenciones, proyectaremos imágenes de la realidad de los casinos y propondremos respuestas a las preguntas.
Estaremos en esos lugares, con la invitación a militar en una idea, en defensa del Patrimonio social de los pueblos de Huelva. Estas serán las citas en septiembre:
Día 11, Gibraleón, Círculo de Labradores y Artesanos.
Día 12, Diputación de Huelva.
Día 15, Aracena, Casino Arias Montano.
Día 16, Rociana, Casino de Rociana.
Día 17, Nerva, Sociedad Centro Cultural.
Día 18, Corrales, Casino Minero.
Casinos como Niebla, Galaroza, Isla Cristina, Moguer, … ya no estarán en la Asociación. Buscamos los medios para que nunca un Casino de Huelva cierre sus puertas porque le falte el apoyo, la colaboración, la organización, la planificación, … con los casinos de otros pueblos.
Nuestra dirección de correo electrónico, ya está disponible: [email protected]
En los seis sitios en los que se presenta la Asociación, estaremos nosotros.
Nace una Asociación del Asueto, para el Patrimonio y por la Cultura. Así, con mayúsculas. Porque Asueto, Patrimonio y Cultura, son dioses de un mismo lugar: Los pueblos del Sur.
Grupo Azoteas
www.azoteas.es
[email protected]