Redacción. Un total de 98 familias onubenses se han beneficiado ya de la bonificación fiscal incorporada en este mandato por el Equipo de Gobierno del Ayuntamiento de Huelva para rebajar el impuesto de plusvalía a determinadas herencias, siempre que se trate de la vivienda habitual tanto del fallecido como de los adquirientes. Según los datos contabilizados por los servicios económicos del Consistorio hasta el pasado 15 de junio, esta medida tributaria ha eximido a los afectados del pago de un total de 15.884 euros desde que entraran en vigor las ordenanzas fiscales de 2016.
Como ha destacado la segunda teniente de alcalde de Economía y Hacienda, María Villadeamigo, con esta medida se está dando respuesta desde el Consistorio a “la grave situación en la que a veces se encuentran cónyuges viudos e hijos del fallecido que carecen de ingresos para hacer frente al pago de este impuesto, pero en modo alguno a otros supuestos en los que la herencia supone un notable beneficio económico”.
En esta línea, el Equipo de Gobierno viene revisando en esta legislatura las políticas tributarias que competen al Ayuntamiento desde el compromiso de que “Huelva tenga unos impuestos y tasas más justos y equitativos, para lo que estamos incorporando una serie de mejoras, como estas bonificaciones para las herencias, la ampliación de las bonificaciones del Impuesto sobre Bienes Inmuebles (IBI) a todas las familias numerosas o la exención de la plusvalía para los casos de dación en pago.
Respecto a esta última medida, como ya avanzó la concejala, son ya 99 las familias onubenses a las que se les ha aplicado expedientes de exención, dejando de abonar un total de 61.886 euros. A estos casos de dación en pago articulados como compraventa de vivienda hay que sumar una treintena de hogares a los que el Consistorio devolverá este tributo de forma retroactiva. “Con hechos y gestión estamos demostrando nuestro compromiso social desde que arrancó el nuevo mandato”, ha enfatizado Villadeamigo, añadiendo que con esta medida, el Ayuntamiento de Huelva interpreta de manera más extensiva el beneficio fiscal reconocido por la Ley, al concretarse en la normativa municipal, “asegurando así un tratamiento más justo a familias a las que, a pesar de haber perdido sus viviendas, el Ayuntamiento les venía exigiendo el pago de ese tributo”.