S. D. Suma y sigue y a buen nivel. Carolina Marín, desplegando un buen juego, se ha clasificado para la semifinal del Open de Indonesia de bádminton después de derrotar a la india Saina Nehwal en dos sets (24-22 y 21-11) en un partido que duró 47 minutos.
La mejor Carolina se vio en el Istora-Gelora Bung Karno Senayan de Yakarta en un duelo exigente ante la india, que le complicó la vida en gran medida en el primer set, pero que fue superada en el segundo por una incontestable jugadora de Huelva.
La historia del primer set fue parecida al que disputó un día antes ante Yamaguchi. Carolina se vio con la manga en contra y a punto de cederla, pero sacó fuerzas de flaqueza y juego para darle la vuelta al set. No llegó a verse en la obligación de levantar hasta cuatro volantes de set -sólo fue uno-, pero sí estuvo con un inquietante 16-19 tras un parcial anterior de 1-9. Y eso que el set comenzó igualado (7-7), y que luego fue cayendo del lado de la onubense, que se fue al intervalo con una renta de cuatro puntos (11-7), que se convirtió en seis con el 13-7. De ahí en adelante fue la india la que impuso su ley hasta darle la vuelta con el mencionado parcial de 1-9, hasta colocarse con un 14-16 y luego con el reseñado 16-19. Pero Carolina reaccionó y llegó a empatar, pero sin poder evitar que Saina disfrutara de un volante de set con 20-19. Nueva reacción de Carolina para equilibrar el set y colocarse por delante, hasta cerrarlo con el 24-22.
El triunfo de la onubense, y de la forma cómo se produjo, fue letal para la reservas anímicas de Saina Nehwal que, en la segunda manga, poco pudo hacer ante el mejor juego de la bicampeona del mundo. Carolina, desde el principio (4-1) se hizo con la riendas del juego y, tras llegar con una renta sólida de 11-5 al intervalo, cimentó su triunfo hasta con cierta holgura por 21-11.
Ahora Carolina Marín se verá las caras con la final en juego con la china Yian Wang, con la que ha jugado en seis ocasiones, con tres triunfos para cada una, si bien en el precedente más cercano, este año en Malasia, venció la asiática.