Redacción. El Teatro Municipal Juan Alonso de Guzmán acogió el pregón de la Hermandad del Rocío de San Juan del Puerto; en este caso el trigésimo sexto que fue pronunciado por la persona que ejerce en la actualidad de Secretario, Manuel Jesús Castilla Gómez. Previamente, tenía lugar el traslado del Simpecado desde la ermita hasta la Iglesia Parroquial. La alcaldesa Rocío Cárdenas Fernández y representantes de la Corporación Municipal acompañaron a la Hermandad que preside José María Márquez Minchón.
A las diez de la noche hacía su entrada en el teatro la comitiva de quienes ocuparían asientos en el escenario adornado con banderas e insignias rocieras. La flauta y el tamboril dieron paso a Antonia González Cabello que mantuvo el acto y pidió la presencia de Cristina Méndez Castilla como autora del cartel para la romería de 2016 de esta hermandad. Un dibujo de la Virgen arropando la medalla sanjuanera fue descubierto por ella misma, por el presidente y la alcaldesa. Seguidamente Antonio Gómez presentó al pregonero como persona cercana y diáfana diciendo de él «lo conozco muy bien y se aplica términos como dedicación, compromiso, lealtad, entusiasmo, perfección y exigencia». Recordó que fue desde 1986 desde que profesan juntos la fe y manifestó del pregón «una responsabilidad que ha asumido con todas sus consecuencias«.
Agradeció a su presentador, Junta de Gobierno, mujer, hija y presentes. Reconoció ser «una oportunidad inolvidable» y lo dedicó a los buenos rocieros que entonces y hoy continúan trabajando por su hermandad. Manuel Jesús puso de manifiesto en la media hora larga una conversación mantenida en su día con una señora que resultaría ser la propia Virgen que le contó cómo era el Rocío de antaño.
Recorrió momentos como cuando los mellizos le cantan al Simpecado de Moguer, la llegada a ‘las hermanillas’, misa de romeros, llegada a Gato o Pino Gordo donde anidan los cinco simpecados, la encina de Antuán o a la parada del charco convertido en Río Jordán antes de llegar y rubricar «el amor de una madre».
Tras repasar el viernes de convivencia o sábado de presentación se introdujo en la terminación de la espera «momentos de Almonte y también de San Juan». El pregonero se queda con lo vivido en su hermandad y apuntó que con la recogida de la señora comenzaría un nuevo Rocío, el que Castilla siempre vio en su «caminar sencillo y sincero para quien está en el altar» -exaltó.
Tras la entrega de unos presentes a los intervinientes y el canto de la Salve concluía el pregón rociero 2016. Lo próximo que tiene por delante la hermandad será el triduo preparatorio durante los días 28, 29 y 30 de mayo.