Redacción. La Plaza de España de San Juan del Puerto ha acogido este 28 de febrero el acto institucional que como cada año celebra el Ayuntamiento con la izada de la bandera, el Himno de Andalucía y la lectura del manifiesto por parte de la alcaldesa. Arropado por los miembros de la Corporación Municipal, jueza de Paz, el jefe de la Policía Local y el comandante de puesto de la Guardia Civil, el acto ha contado con la participación de los tres clubes ciclistas de la localidad sirviendo de nexo de unión con la jornada de convivencia en la finca «La Torre» hasta donde se desplazaron con enseñas andaluzas y auxiliados con los miembros de Protección Civil.
La fachada del Ayuntamiento lucía tonalidades blanquiverdes con una gran bandera que colgaba desde el balcón central. En la parte izquierda un mástil aguardaba la bandera andaluza que sería izada momentos después de «Obertura española» que interpretó la Banda de la Escuela Municipal de Música. La alcaldesa, Rocío Cárdenas procedió a la lectura de un manifiesto donde habló del 28 de febrero de 1980 como «un hito histórico que ha permitido la superación de una etapa oscura para avanzar hacia un periodo de convivencia y progreso» -dijo, refiriéndose al papel actual de los ayuntamientos «quienes más cerca estamos de los problemas de la ciudadanía a pesar de las dificultades en que nos encontramos».
La alcaldesa anunció como objetivo del equipo de gobierno «el poner las condiciones para que nuestra economía cree empleo y mirar y ver en San Juan del Puerto sus posibilidades de desarrollo, su enclave estratégico, su historia y su cultura, el muelle, las salinas, el puerto y su agricultura deben ser ejes fundamentales para permitir ese progreso en nuestro pueblo y en esta tierra» -manifestó.
Tras sus palabras, se procedía a la izada de la bandera andaluza que sostuvo en representación de la excelente salud del deporte sanjuanero, el capitán del San Juan Futsal y pichichi del equipo Manuel Robles Alfonso «Titi». El coro infantil de la Escuela de Música cantó el Himno al compás de la banda que dirigía el maestro Chacón. El acto culminó con el pasodoble «San Juan del Puerto» que compusiera Pedro Sandia Cano. Seguidamente, los clubes «ACO», «Verano Azul» y «Los Barriguitas» realizaron un recorrido en bicicleta por las calles del pueblo y marcharon hacia «La Torre» con enseñas andaluzas.
Pese al viento y las bajas temperaturas, la jornada de convivencia en la finca comenzaba con la visita a la ermita consagrada a María Auxiliadora. Allí Marcelino Acosta agradeció al Ayuntamiento haber contado con su casa para esta celebración. Construido en 1743, el retablo de la capilla fue restaurado en Sevilla en 1899. La Hermandad de San Isidro realizó una ofrenda floral al patrón de los agricultores y el primer teniente de alcalde, José Barrado, agradeció al ganadero su predisposición a colaborar con el Ayuntamiento «estamos en un entorno del pueblo y entre todos debemos fomentarlo», al igual que agradeció a la Hermandad de San Isidro su implicación.
Las visitas prosiguieron en los vestigios de la torre-fortaleza árabe que le da nombre a la finca sirviendo de linde con el término de Gibraleón a través de la frontera natural de la ribera de La Nicoba. El historiador José Manuel Márquez explicó que se trataba de una construcción rectangular con una torre cuadrangular en una de sus esquina que servía para vigilar al territorio. Como detalló «estos restos están datados entre los siglos XIII al XV y en época musulmana la zona era del reino taifa de Niebla siendo en 1262 cuando conquistan los cristianos este territorio que delimitaba el señorío de Gibraleón y el condado de Niebla»-explicó.
La Hermandad de San Isidro instaló en la nave de carruajes una barra con servicio de plancha, tapas y bebidas repartiendo la degustación de la garbanzada entre los asistentes. Las alumnas de la Escuela Municipal de Baile Flamenco dirigida por Leonor Rebollo realizaron unas bulerías y bailaron unas sevillanas dándole el toque cultural al día de todos los andaluces.
