Ana Rodríguez. El onubense Juan Manuel Pérez Leal recogía hace unas semanas, junto a sus compañeros de la agencia de publicidad alemana Cre art, en la que trabaja desde hace año y medio, dos premios en el marco del Gregor International Calendar Award. El certamen, al que se presentaron más de 1.000 calendarios, ha reconocido con la Plata y el Premio a la Excelencia en la Producción -departamento en el que trabaja el onubense- a esta empresa en la que Pérez desempeña labores de preimpresión y retoque fotográfico.
«El año pasado ganamos el Bronce, pero éste nos hemos llevado un premio a la Excelencia a la Producción por la calidad de la impresión, lo cual me atañe a mí directamente, y uno de los principales galardones, en este caso la Plata, que sólo se concede a siete de los 12 finalistas», explica Pérez.
Cabe destacar que estos premios, que se celebran cada año en la ciudad alemana de Stuttgart a principios de enero, tienen una relevancia máxima en la temática de calendarios. En ellos participan principalmente empresas de todos los rincones de Alemania, pero también de Austria, Suiza y Japón. De hecho, hay un jurado paralelo japonés para valorar los trabajos procedentes de este país, el cual participa muy activamente presentando increíbles almanaques.
Como el onubense explica, el calendario por el que les han premiado es producto de una gran dedicación, de un trabajo que comienza en agosto y que culmina a finales de noviembre. «Todos los años recibimos un correo donde se nos pide a cada trabajador una idea para la portada o las páginas interiores del mismo, conectada ya a un tema decidido previamente. Este año ha sido ‘Gold’ (dorado) y a raíz de ese concepto abstracto, hasta el personal de limpieza, no es broma, participa en la tormenta de ideas. El resultado es mejor verlo y sentirlo que explicarlo. Uno ve reflejado en él el entusiasmo y el trabajo de varios meses de un equipo entregado y perfectamente coordinado«, señala Juan Manuel Pérez.
El jurado de estos Premios valora distintas dimensiones de los trabajos y busca que todas ellas converjan en un excelente resultado, como son el diseño, la calidad de los materiales, el impacto visual, la coherencia del tema que se presenta, etc. Así pues, no sólo quieren un calendario decorativo, sino que, mientras vas pasando sus páginas, el producto te cuente una historia en la que poder sumergirse.
En el caso del calendario ‘Gold’ de Cre art, el jurado resaltó la calidad de impresión y la espectacularidad sensorial de los distintos materiales empleados, aspectos en los que ha jugado un papel fundamental, sobre todo en el primero, la aportación del onubense, así como la «historia» encerrada en el mismo, que también caló en el jurado.
Juan Pérez forma parte del departamento de Medien Service de su empresa, dedicado a la preimpresión y retoque fotográfico. En él dan forma a las ideas de los creativos, puliéndolas y convirtiéndolas en algo tangible, para lo cual trabajan fundamentalmente la maquetación y los parámetros de color. En relación al calendario ganador, «el trabajo de los retocadores fotográficos era fundamental para obtener una diversidad de dorados impactantes y hemos aplicado todos nuestros conocimientos sobre la física de la luz y el papel para obtener un resultado matemáticamente perfecto», destaca.
Sobre el día de la entrega, Pérez recuerda que creía que sólo recibirían el Premio a la Excelencia, quedando enormemente sorprendido cuando les llamaron para recoger, sin esperarlo, la Plata. «En ese momento yo llevaba la cámara de mi empresa y no pude subir al escenario, pero me daba igual, estaba inmensamente feliz y orgulloso por el trabajo de nuestro equipo«, afirma.
Cabe recordar que Juan Manuel vive en Fulda desde finales de 2012, ciudad a la que llegó sin tener ni idea de alemán. Natural de Huelva, estudió un módulo de grado superior en Aplicaciones Informáticas y luego un máster en Diseño Gráfico en el Instituto de las Artes Visuales. Trabajó en empresas de publicidad como Cícero y Contracorriente, en imprentas como GAM y Gómez Alcalá, e incluso fue maquinista en la legendaria Imprenta Jiménez.
Tras aterrizar en la ciudad alemana, el primer empleo que obtuvo fue en un restaurante italiano y, más tarde, en el hospital Klinikum de Fulda, del que formaba parte del equipo de desinfección. Tras dos años en el centro sanitario, un amigo de Juan le habló de una oferta de empleo que había visto en Internet en la que la empresa Cre art, ubicada curiosamente en la calle en la que vivía el onubense, buscaba una persona con estudios y experiencia en preimpresión y diseño gráfico, perfil que que se ajustaba mucho al suyo.
«Me llamaron justo al día siguiente de enviarles mi currículum junto a mi portfolio. Al final de la entrevista me ofrecieron directamente el puesto de trabajo, previa prueba de una semana bajo la supervisión del encargado de mi departamento. Fui muy feliz al enterarme de que me quedaba y que mi contrato inicial era de nada menos que dos años», recuerda Pérez.
Desde entonces el onubense trabaja para la agencia de publicidad con mayor envergadura de Fulda y en la que están empleadas alrededor de medio centenar de personas. La empresa consta de tres edificios donde se albergan cinco departamentos: Creación, Estudio Fotográfico, Multimedia, Producción y Medien Service, en el que trabaja Juan Manuel. En él se ocupan de la preimpresión pura, es decir, desde el análisis exhaustivo de los archivos de impresión, pasando por la imposición y terminando el proceso con la filmación de las planchas.
Según explica Pérez, el suyo «es un departamento un tanto complejo y donde más gente trabaja con distintas cualificaciones. Además existe un subdepartamento que sólo y exclusivamente trabaja para el mayor cliente de la empresa, ‘Tegut’, una cadena de supermercados que cuenta actualmente con 290 establecimientos repartidos por Hessen, Baviera, Turingia, Baja Sajonia, Renania Palatinado y Baden-Wutemberg. Yo trabajo en la preimpresón y en el retoque fotográfico de todos los productos que tienen un vínculo con ‘Tegut’ exclusivamente y, junto a un compañero, del resto de trabajos que requieran tratamiento con Photoshop».
Así, en su día a día, Juan Manuel recibe productos del citado supermercado, tanto reales como muster, y mediante Photoshop crea imágenes presentables de los envases, ajustándose a la realidad de los mismos. Para ello cuenta con una lámpara que reproduce la luz real que tendría un cliente al encontrarse el producto en el mercado, dos pantallas que reproducen en un altísimo porcentaje los colores que van a ir a imprenta y todo ello conectado a un equipo de elevadas prestaciones.
Por otro lado, también realiza retoque fotográfico de imágenes para otros clientes, trabajos de preimpresión y, de manera excepcional, de maquetación y diseño. «El jefe de mi departamento revisa todos los trabajos. Es una persona eficaz que si metes la pata no se enfada, sino que te instruye y te enseña dónde estaba el fallo para que no vuelva a repetirse», señala Juan.
El empleo actual del onubense supone para él haber cumplido el objetivo que se marcó cuando llegó a Alemania. A pesar de que su contrato termina en noviembre, tiene esperanzas de que le renueven pues, como reconoce, «la buenísima atmósfera y buen rollo que se respira en esta agencia me hacen ir cada día con ilusión al trabajo». Un empleo en el que ve reconocido su esfuerzo y que le está reportando premios internacionales para su currículum.
