Redacción. El Belén Viviente de Corrales abre este sábado 19 de diciembre sus puertas, después de verse obligados a suspender los actos de representación del pasado sábado por motivo de las lluvias, abriendo el domingo pese a la situación climática y recibiendo la visita de 700 personas.
Cada año, cuando se acercan las fiestas navideñas, numerosos voluntarios de la Asociación Cultural Belén en Corrales se preparan para escenificar y ambientar, con sus representaciones, los días previos y posteriores al Nacimiento del Niño Jesús.
El Belén Viviente de Corrales, que podrá visitarse durante los fines de semana del mes de diciembre y el primer fin de semana de enero, en horario de 17.30 a 21.00 horas los sábados, y de 11.30 a 14.00 horas los domingos, inicia su andadura en 2007, cuando un grupo de personas, principalmente de la localidad, apuestan por recrear las imágenes de aquellos días en los montes de Judea, bajo la coordinación de la asociación Belén en Corrales. La entrada al recinto es gratuita.
En esta edición de 2015, los visitantes podrán seguir la recreación de pasajes navideños –que incluye el pesebre, con José y María y el niño Jesús acostado, envuelto en pañales-, con una escenografía muy cuidada y de calidad y la caracterización de los pobladores de Belén en esa época. El recorrido por las calles de la ciudad nos acercará al espíritu navideño, acompañados de pastores, artesanos, danzarinas, mercaderes y con la presencia de la Centuria romana.
Más de 200 personas, de distintas edades, se convierten en actores durante estos días, dando lugar a un recorrido singular. Estos figurantes, que también comparten espacio y protagonismo con ovejas, conejos, palomas, patos y gallinas, invitan a los participantes a degustar algún plato típico local –como las migas-, postre –como el bizcocho-, o dulce –como el vino y el mosto.
Además del recorrido que conducirá al visitante por la recreación de la aldea y que le traslada la vida del pueblo hebreo, el Belén cuenta con el escenario muy singular como es el que aportan el Casino Minero y el Cinema-Teatro, a lo que hay que sumar los bailes de las danzarinas hebreas, cuyo ritmo, juventud, color y alegría, acompaña la entrada al teatro. Entre las construcciones nuevas, destacan la del escriba y las dulceras.
