Redacción. Los candidatos número dos al Congreso de los Diputados y número tres al Senado de Unidad Popular por Huelva, Mabel Rodríguez y Miguel Ángel Gea, respectivamente, han mantenido un encuentro con el comisario jefe del Cuerpo Nacional de Policía (CNP), Antonio Placer, para conocer los medios con los que cuenta ese cuerpo para combatir la violencia machista en Huelva. Durante la reunión, Rodríguez y Gea han recibido información sobre el funcionamiento de los distintos servicios policiales encargados de esa labor y han explicado a Placer las principales líneas del programa electoral de Unidad Popular en materia de lucha contra la violencia machista y por la igualdad de género.
El comisario jefe ha explicado cómo trabajan el Servicio de Atención a la Familia (SAF) y la Unidad de Prevención, Asistencia y Protección (UPAP), que suman 15 funcionarios en la comisaría de Huelva, dotación de personal que Placer ha considerado suficiente para la capital onubense. El máximo responsable del CPN en la provincia también ha descrito todo el proceso desde que una mujer denuncia malos tratos hasta que se toman las medidas de protección necesarias para garantizar su seguridad, siempre en función del nivel de riesgo al que esté expuesta.
Por su parte, los candidatos de Unidad Popular al Congreso y al Senado han expuesto al comisario jefe algunas de las principales propuestas electorales, entre las que destaca la de que se dedique el cinco por ciento de los presupuestos generales del Estado a políticas de igualdad. Esa asignación de recursos económicos permitiría el desarrollo de programas eficaces de prevención, sensibilización y acción contra la violencia de género.
Unidad Popular defiende la reforma de la Ley Orgánica 1/2004, de Medidas para la Protección Integral contra la Violencia de Género para que en ella se incluyan otras formas de violencia contra las mujeres como son y no sólo la que se ejerce en el ámbito familiar. Esas otras formas de violencia de género tienen que ver con aspectos como la discriminación laboral o la explotación sexual.
