Redacción. Las aguas de baño de las playas andaluzas mantienen unas adecuadas condiciones sanitarias, según el informe que ha elaborado la Consejería de Salud sobre el estado del litoral correspondiente a la primera quincena de septiembre. Este estudio se basa en los análisis realizados por la Dirección General de Salud Pública y Ordenación Farmacéutica.
Andalucía es la comunidad autónoma que controla el mayor número de playas y de kilómetros de costa de todo el país: 581 kilómetros distribuidos en 262 playas (Almería, 76; Cádiz, 54; Granada, 29; Huelva, 19; y Málaga, 84), con 346 puntos de muestreo. Las aguas continentales suman 25 zonas de baño y 26 puntos de muestreo. Las muestras de agua han sido analizadas para determinar los diferentes parámetros exigidos por la normativa vigente, como los microbiológicos, transparencia, color, aceites minerales, presencia de espumas persistentes y sólidos flotantes.
Las playas de Huelva y Málaga no presentan ningún tipo de incidencia. En Almería, se ha registrado una ligera alteración de parámetros microbiológicos en las playas de El Calón, Garrucha, Castillo de Macenas, Piedra Villazar, Cala Cerrada, Calipso, Los Nardos, Aguadulce, Cerrillos, La Ventilla, Romanillas, Urbanización Roquetas y Las Marinas-Bolaga. Si bien, en todos los casos, los parámetros biológicos se encontraban dentro de la normalidad en el momento de emisión del informe. Esta misma situación se ha dado en la playa Bajo de Guía-Bonanza, en Cádiz, y en Carchuna, en Granada.
En estos casos, las únicas incidencias se han detectado en la balsa Cela Lúcar (Almería), en los ríos Genil y Maitena (en Güejar Sierra, Granada) y Manantial Fuencaliente (Huéscar, Granada) por ligera alteración de los parámetros microbiológicos que se encontraban también dentro de la normalidad en el momento de emisión del informe. La alteración de los parámetros biológicos se produce por las intensas lluvias registradas en este periodo.
La Consejería de Salud recuerda que los ayuntamientos son los encargados de mantener las condiciones de limpieza y salubridad de las zonas de baño, de colocar carteles informativos con las características, infraestructuras y medidas de seguridad, de vigilar los posibles puntos de vertido cercano para evitar riesgos y adoptar las medidas de gestión que le requieran las administraciones sanitarias y ambiental.
Las continuas labores de vigilancia de la calidad de las aguas de baño permiten elaborar quincenalmente informes sobre su estado sanitario que se pueden consultar en la web de la Consejería (www.juntadeandalucia.es/salud/) hasta que finalice la temporada de baño, el 30 de septiembre.