P. G. El recreativismo vive angustiado y, al mismo tiempo, esperanzando, en recibir buenas nuevas en cuanto a la venta del Recreativo de Huelva, lo que en principio podría garantizar la supervivencia de la entidad. Todo estaba preparado para que este viernes las partes que negocian esa venta, Gildoy España y un grupo inversor hispano-mexicano, firmaran el acuerdo, pero al final problemas burocráticos han impedido esa firma, que se demorará hasta la semana que viene.
Por si fuera poco, la aparición de otro grupo, éste español, interesado en la compra del club, también ha tenido que ver en esta demora, ya que Víctor Hugo Mesa, principal accionista de Gildoy España, quiere conocer lo que puede ofrecer este nuevo grupo.
Inicialmente se conoce, de lo poco que ha trascendido de las negociaciones, que con los hispanos-mexicanos hay un principio de acuerdo, todo supeditado a un análisis más exhaustivo de la propia situación del Recre, lo que ha abierto la puerta a Mesa a escuchar otras ofertas.
Mientras el aficionado del Recre espera como agua de mayo la firma de esa venta que, si se produce en los términos que se han dado a conocer en los medios, significaría la supervivencia de la entidad, ya que el nuevo dueño estaría en disposición de acometer los desembolsos más inmediatos y cruciales, como la inscripción para poder participar en Segunda B, el pago a los jugadores para evitar las denuncias y así no descender a Tercera, y pagar las cantidades preceptivas para poder acceder al aplazamiento de la deuda con Hacienda y Seguridad Social.