S. D. Emotiva. Así se puede catalogar la fiesta que pudo disfrutar este jueves la familia del Club Rítmico Colombino en el pabellón Diego Lobato de Huelva, y que sirvió de dignísimo final a una temporada llena de éxitos. Con las gradas al completo y una gran dosis de ilusión y espectáculo, las chicas del Rítmico Colombino y sus escuelas demostraron un año más que la gimnasia en Huelva tiene algo especial.
Desde las más pequeñitas hasta la más veteranas, todas han querido aportar su granito de arena en esta celebración. Con un programa en el que todas tenían su minuto de gloria, se vivieron dos horas de magia sobre el tapiz. Las niñas de competición han realizado los ejercicios que tantos triunfos les han dado este año, y las que no han participado en competiciones, han mostrados coreografías de los diferentes encuentros en los que han participado y otras coreografías especiales para el evento.
Un total de 160 gimnastas se dieron cita en el evento, pertenecientes al grupo de competición, promesas, perfeccionamiento e iniciación. Se ha contado con la participación de la Escuela Municipal de Isla Cristina, colaboradora del Rítmico, y con la escuela del colegio José Oliva, de donde tan buenas gimnastas han salido.
El equipo técnico, formado por Andriana Stoiska, Ana Benítez, Soraya Rivera, Dori Palma, María Gálvez, Alla Lialkova y Nazaret Vélez, se mostró satisfecho por lo acontecido durante el año, incidiendo en que se ha hecho bueno el lema de la entidad: “lusión, trabajo y superación”.
Aunque este acto fue el colofón a la temporada, en realidad ésta sigue, no se para, porque un año más, durante el mes de julio, se desarrollará en el Diego Lobato la Escuela de verano, en el que todas las niñas que lo deseen podrán iniciarse en este deporte.
