Redacción. El presidente de la Cámara de Comercio de Huelva, Antonio Ponce, ha promovido un encuentro entre los responsables del Proyecto Lince –acelerador de gran intensidad de iones – con el subdelegado del Gobierno en Huelva, Enrique Pérez Viguera, a quien han expuesto con detalle la singularidad de esta iniciativa que traerá consigo avances en medicina, especialmente en tratamientos contra el cáncer, y en la industria en general, como por ejemplo en la aeronáutica, entre otros. El mismo daría empleo a unos 80 científicos y se convertiría en el único en el mundo de estas características.
En la reunión han estado presentes también José Sánchez, jefe del servicio de radiología y protección radiológico del Hospital Juan Ramón Jiménez; Mª Victoria Alonso, gerente de la Fundación Beturia; Arsenio Martínez, director general de la Cámara de Comercio; y Luis Márquez, Director de Algaida Ingenieros.
Según Antonio Ponce, “hay que aunar voluntades para conseguir que esta inversión se quede en Huelva ya que nos permitiría convertirnos en centro de referencia en cuanto a los avances que el Lince entraña para la salud, sin desdeñar el alcance que el mismo tendrá para la economía provincial por cuanto que serviría de foco de atracción a sectores auxiliares de la industria tecnológica”.
Por su parte, el subdelegado de Gobierno ha mostrado su interés por conocer de primera mano este proyecto y se ha comprometido a trasladar toda la información facilitada por sus promotores al Ministerio de Economía y Competitividad de cara a solicitar fondos de la Unión Europea para su financiación.
La Fundación Andaluza Beturia para la Investigación en Salud (FABIS) es la promotora del ‘Lince’ cuya inversión alcanza los 100 millones de euros y su intención es conseguir ubicar la iniciativa en Huelva, concretamente en el PCTH y, según se ha podido saber, nuestra provincia cumple muchos de los requisitos para que se instale en ella.
Conocido como ‘Proyecto Lince’, estamos ante una gran infraestructura europea de iones estables para realizar estudios de estructura y dinámica que actualmente no pueden realizarse en ningún otro lugar de la Unión Europea y del mundo. Se trata de un acelerador diferente al que intentó promover la Universidad de Huelva en 2011 ya que es de gran densidad de iones, al límite de la tecnología actual con aplicaciones en la medicina y en la industria que quedaría enmarcado en la Europoean Strategy Forum on Research Infraestructures, entidad que define las infraestructuras científico-tecnológicas de especial importancia para la UE.