M. P. D. El Centro Andaluz de las Letras ha organizado este jueves 19 de marzo a partir de las 20.00 horas un encuentro con la escritora Clara Obligado en la Biblioteca Provincial de Huelva, donde presenta su último libro ‘La muerte juega a los dados‘. Una oportunidad para conocer en persona a una mujer amante de la literatura, cuya vida es apasionante.
Argentina de nacimiento, en el año 1976 se vino a España huyendo de la dictadura militar argentina. Desde entonces vive en Madrid, donde organizó los primeros talleres de escritura del país. Además, sus antepasados son de Calañas, del siglo XVII, por lo que ella ha visitado la localidad onubense. Incluso, el nombre de la biblioteca municipal lleva el nombre de la ‘Familia Obligado’ y una calle tiene el nombre de su abuelo.
Una denominación que no es casual. La historia se remonta a 1749, cuando el calañés Antonio Esteban Obligado partió hacia Buenos Aires, donde se casó dos veces. En el primer matrimonio tuvo 10 hijos (en esta rama destacaron en la política y la pintura) y, en el segundo, sólo un hijo, que destacó en literatura. De este único hijo nació el conocido escritor Rafael Obligado, padre del también escritor Carlos Obligado, abuelo de Clara Obligado, que vino a España acompañando a Eva Perón en 1947 y estuvo en Calañas, donde tuvo una gran acogida. Le nombraron hijo adoptivo del pueblo, le pusieron su nombre a una calle y la biblioteca pasó a llamarse Familia Obligado, donando el autor toda su obra al pueblo.
No es extraño, por tanto, que la relación de Clara con la literatura se haya mantenido desde siempre, puesto que procede de una familia con mucha tradición literaria. Estudió Letras en Argentina, siendo alumna de Borges. Su anterior obra, ‘El libro de los viajes equivocados’, obtuvo el Premio Setenil al Mejor Libro de Cuentos. Y, ahora, con ‘La muerte juega a los dados’ llega a su libro número doce.
Así nos lo cuenta en esta entrevista, donde nos adelanta las claves del encuentro que mantiene este jueves con los onubenses.
-Clara, ¿por qué este título, ‘La muerte juega a los dados’?
-Es una respuesta a una famosa frase de Einstein, que dice “Dios no juega a los dados”, o sea, el azar no existe. Mi título dice que sí, que nuestra vida está manejada por el azar. Alguien dijo “La vida es un juego de ajedrez que se decide jugando a los dados”. Me gusta esa idea de que hay cosas que están predeterminadas y que la casualidad tiene mucha importancia en lo que nos sucede.
-¿Qué nos puedes adelantar de este libro?
-Es un libro de relatos que también se puede leer como una novela, un experimento que profundiza en el cuento, le da más posibilidades. Cuenta la historia de tres mujeres a lo largo del tiempo y pasa un poco de todo: hay un asesinato, con el que se abre la historia, una historia familiar, textos históricos y otros humorísticos. Y en cada cuento hay una pista para resolver el asesinato.
-Su vida también podría inspirar una novela…
-La vida de todo el mundo tiene algo de novela. La mía ha sido un poco más movida de lo normal, eso también es cierto.
-¿Qué recuerdos tiene de Argentina? ¿Cómo fue su llegada a España?
-Llegar a un país extranjero nunca es fácil, y menos si se viene por la necesidad de salvar la vida, como fue mi caso. He vivido toda la España post-franquista, aquí aprendí cosas muy importantes. Pero también vuelvo a mi país de origen casi todos los años. Soy una extranjera, una persona que se siente bien y mal en dos lugares. Pero esto creo que es muy bueno para la escritura, que siempre pide un poco de distancia.
-También es una pionera del mundo de la lectura.
-Soy pionera en el mundo de los talleres de escritura y en el de la lectura de microrrelatos, puesto que publiqué una antología que se llamó ‘Por favor, sea breve’ con la editorial Páginas de Espuma que tuvo mucho éxito. Me ha tocado esa suerte, empezar con varias cosas que luego tuvieron mucho éxito. En el fondo, todo es azar.
-Su anterior libro obtuvo un reconocimiento como Mejor Libro de Cuentos.
-Sí, ‘El libro de los viajes equivocados’ ganó el premio Setenil al mejor libro de cuentos del año. Fue un reconocimiento importante y una sorpresa muy grata.
-Hablemos de Huelva. ¿Cuál es la relación de su familia con Calañas?
-Sí, somos de Huelva. Calañas es, en mi familia, un mito. Todos los Obligado quieren conocer el pueblo. Cuando fui este año, la bibliotecaria tuvo conmigo un gesto que nunca olvidaré: me regaló un pequeño baúl con tierra del lugar. De pronto yo, que hace años que me siento extranjera, tuve la sensación de que alguien me reconocía como del lugar. Hice el viaje con mis hijas y mi marido. A todos nos impactó mucho.
-¿Qué nos puede destacar de esta tierra?
-Sólo conozco Calañas, aunque espero conocerla mejor en los próximos años. Al fin y al cabo, y a pesar de la distancia y de los siglos que hace que salimos de allí, es mi tierra. Podría decir que estoy dispuesta a conocer la tierra de mis orígenes, que me gusta ser de allí. Parece un lugar amable.
-¿Tiene previsto algún nuevo proyecto?
-Sí, ya estoy trabajando en un nuevo libro de relatos.
-¿Invitamos a los onubenses al acto de este jueves?
-Bueno, espero que podamos conversar el jueves sobre literatura o sobre lo que nos apetezca más. Los caminos se hacen paso a paso, y este es, para mí, un camino de regreso.
