S. D. Estaba en el ánimo de toda la familia del Club Balonmano Pedro Alonso Niño de Moguer regalar una victoria y un gran partido a su antiguo compañero y amigo Darío Mata después de sufrir un infarto que le tiene en el hospital. Desde antes del minuto se evidenció vistiendo camisetas con el lema ‘Ánimo Darío’. Con mucho corazón de cada uno de ellos bordaron el balonmano para firmar el mejor encuentro de toda la temporada y así alcanzar también su mejor clasificación, la segunda posición, y posarse en la fase de ascenso.
El equipo amarillo, que comenzaba la jornada como tercero tenía un reto de entidad ante el segundo clasificado, el Conservas Huertas Cátedra 70, un de los conjuntos más fiables de la Liga, pero que tuvo que claudicar ante el poderío moguereño. El PAN dio un soberano golpe encima de la mesa mostrando la excelencia en casi todos los aspectos del juego, que le llevaron a su quinta victoria consecutiva en este 2015.
José Francisco Martín estuvo soberbio, la defensa se hizo muro y cerró todas las puertas a su rival y en ataque el juego fue fluido y con alternativas, efectivo en un abanico de variantes. Funcionó el contragolpe, el juego con pivote, el lanzamiento exterior y hasta los jóvenes pusieron su granito de arena en un día en el que el técnico Fernando Castelló cumplía años.
En los primeros minutos el capitán Sergio Cruzado se tuvo que retirar de la pista sangrando por la nariz tras un duro golpe de un rival que fue sancionado sólo con falta. Esta incidencia no impidió que el equipo amarillo funcionase bien en defensa y ataque y abriera una primera pequeña brecha de dos goles (3-1).
Después el equipo de Ciudad Real reaccionó bien aprovechando los desajustes defensivos locales y se colocó a un gol. No obstante, al borde del pasivo Gonzalo Álvarez mantuvo la renta y la amplió desde los siete metros.
Antes del minuto 15 José Francisco Martín realizó una parada de mérito, Cristian Moll marcó el 7-4 y tras un robo que acabó en pérdida el visitante Pinilla apretó de nuevo el electrónico. Pero la entrada de Sergio Cruzado y el buen tono de Velazco, unido a un nuevo paradón de José Francisco, desembocó en la máxima diferencia del duelo (9-5, m. 17).
Después se produjo la exclusión de Nacho Sánchez Medrano y el Conservas Huertas estrelló un tiro desde siete metros en el larguero, pero finalmente aprovecharon la superioridad numérica para que Rodrigo Ripoll rompiera la sequía visitante (9-6, m. 20). Sin embargo un robo y cabalgada bien finalizada de Cristian Moll provocó el tiempo muerto de los de Malagón.
En las siguientes acciones el equipo visitante enlazó varios lanzamientos mansos dificultados por la defensa y que paró sin muchos problemas minutos José Francisco, lo que provocó salidas rápidas a la contra. Dani Podadera puso el 11-6 y tras un pasivo de los de Ciudad Real Sergio Cruzado disparó alto y recortó Lozano, pero Velazco puso el balón a la escuadra.
A un minuto para el final el Conservas Cátedra se puso a tres goles desde los siete metros tras la segunda exclusión de Nacho Sánchez Medrano, pero José Jiménez macó un provocó también una ausencia de dos minutos en el rival. En el último ataque Nicolás puso el 13-10 antes de dirigirse al vestuario.
En la segunda mitad el Pedro Alonso Niño comenzó imponente y con brillantes acciones de defensa, Dani Podadera no perdonó en dos ocasiones consecutivas, a la que se sumó tras otra intervención de José Francisco otro gol a la contra de Alejandro Capelo para un parcial de 4-1 y 17-11 en el marcador (6 goles arriba, m. 35).
La defensa y portería amarilla alcanzaron una solidez que desquició a su rival, mientras que en ataque, a falta de tener a Sergio Cruzado en su gran nivel habitual, se repartió el protagonismo. Martín fue excluido y el lanzamiento desde siete metros Gonzalo Álvarez elevó a siete tantos la renta (18-11, m. 38).
La sequía visitante la rompió Pinilla y después el pivote Lozano fue capaz de abrirse camino en la zaga moguereña. No obstante, el pivote antequerano José Jiménez a pase del uruguayo Velazco le respondió en la zona contraria, José Francisco le detuvo también y Capelo desde el extremo sumó uno más.
A nueve goles subió la diferencia con otro tanto de José Jiménez y minutos después Dani Podadera puso la decena (24-14, m. 47). La exclusión de Pinilla aumentó dificultades a los visitantes y Gonzalo Álvarez dio continuidad al festival amarillo. La confianza les situaba con viento a favor ante un rival maniatado y que ya solo peleaba por recuperar el goal-average particular, ya que ganó por cinco goles en su casa (21-26).
Superado el ecuador de la segunda mitad el ataque no mantuvo la progresión espectacular de minutos anteriores, pero la defensa siguió muy firme y la diferencia se mantuvo estable.
Castelló dio entrada en portería a Emilio Guerrero, que también dio la talla, y también otorgó minutos a los más jóvenes, que llevaron a 12 tantos la diferencia (27-15). Finalmente recortaron dos tantos los visitantes y el marcador final fue de 27-17.
PEDRO ALONSO NIÑO: José Francisco Martín y Emilio Guerrero (p), José Jiménez (3), Gonzalo Álvarez (7), Alejandro Velazco (6), Alejandro Capelo (3), Sergio Cruzado (0), Dani Podadera (5), Cristian Moll (3), Fernando Sánchez Medrano (0), Nacho Sánchez Medrano (0), Dani Domínguez (0), Salva Piosa (0), Isaac Cumbreras (0), Álvaro Quintero (0).
CONSERVAS HUERTAS CATEDRAL 70: Mario Toribio y Rodrigo Aceta(p), Omar Arema (0), Rodrigo Ripoll (1), David Segovia (0), Fernando Donado (2), Francisco Martín (0), Nicolás Herencia (1), Pablo Lozano (4), Daniel González (1), Álvaro Izquierdo (2), Juan Ramón Tapiador (3), Óscar Pinilla (3).
Árbitros: José Alberto Macías De Paz y Ernesto Ruiz Vergara. El vistante Francisco Martín vio la roja tras acumulación de sanciones (56′). Fueron excluidos con dos minutos los locales Nacho Sánchez Medrano (2), Gonzalo Álvarez, Alejandro Velazco e Isaac Cumbreras; y los visitantes, Álvaro Izquierdo y Óscar Pinilla.
Parciales cada cinco minutos: 3-1, 5-3, 7-5, 10-6, 11-6, 13-10 (descanso); 16-11, 18-12, 22-14, 25-14, 26-15, 27-17 (final).
Incidencias: Partido correspondiente a la 18ª jornada en el grupo F de la Primera Nacional de balonmano, disputado en el Pabellón Zenobia de Moguer.