Redacción. “Se trata de una obra muy necesaria para garantizar la seguridad vial en un punto conflictivo y muy demandada por los ciudadanos”. Con estas palabras ha definido el alcalde de Cartaya, Juan M. Polo, “la enorme importancia que para los cartayeros tiene el inicio de las obras de construcción de la rotonda de acceso al cementerio municipal, una infraestructura vial básica que llevan reivindicando muchos años y que a partir de hoy empieza a ser una realidad”.
Con gran satisfacción el primer edil, acompañado por el concejal de Urbanismo, Gabriel Maestre, ha comprobado esta mañana sobre el terreno el inicio de unos trabajos con los que, según destacaron, “se han culminado años de gestiones y este Equipo de Gobierno ha conseguido, primero, desbloquear la situación que impedía darle forma al proyecto, y en segundo término, buscar la financiación, algo nada sencillo en los tiempos que corren, para que empiece a tomar forma”.
Las obras se prolongarán durante los próximos dos meses, y se espera que finalicen sobre mediados de febrero. Esta rotonda forma parte del conjunto de infraestructuras viarias comprendidas en el Plan de Inversiones aprobado en el marco del convenio de adjudicación del agua a la empresa Aqualia.
Este plan comprende la construcción de otras dos rotondas más que también se ubican en puntos peligrosos a lo largo de la travesía de la N-431 a su paso por Cartaya, concretamente el cruce de Consolación y el cruce de acceso al Polígono Industrial La Barca. En total, las tres rotondas supondrán una inversión de 1,1 millones de euros, y se espera que estén todas concluidas en un plazo máximo de cuatro meses.
