MGL / Ana Rodríguez. El Festival de Cine Iberoamericano de Huelva nos ha regalado estos días la presencia de un gran actor y cantante, Javier Godino. Era el malo de la ganadora del Oscar en 2010 El secreto de sus ojos, la cinta con la que su nombre empezó a sonar con más fuerza, aunque este madrileño ya llevaba tiempo en el mundo de la escena cuando logró uno de los papeles protagonistas en el film de Juan José Campanella.
Su magnífica interpretación en la película argentina le valió las nominaciones en los años 2009 y 2010 a los Premio Sur de la Academia de las Artes y Ciencias Cinematográficas de la Argentina como mejor actor revelación y también como mejor actor revelación en los Premios de la Unión de Actores, respectivamente.
En el cine hemos podido disfrutar más recientemente de la maestría de Godino en La voz dormida, de Benito Zambrano; Todos tenemos un plan, de Ana Piterbarg, filmada en el Delta del Paraná junto a Viggo Mortensen, Daniel Fanego, Sofía Gala y Soledad Villamil (una de las homenajeadas este año por el Iberoamericano con el Premio ‘Ciudad de Huelva’); o Los días no vividos, de Alfonso Cortés-Cavanillas, junto a Ingrid Rubio o Asier Etxeandía.
En 2011 estrenó la película Los muertos no se tocan, nene de José Luis García Sánchez, basada en una novela de Rafael Azcona, y en 2008 tuvo un papel en la producción de Hollywood Deception, junto a Hugh Jackman e Ewan McGregor.
En otro plano, Javier Godino ha actuado, entre otros, en los musicales Más de 100 mentiras. Sabina, el musical; 40 El Musical; A, el musical de Nacho Cano; y Hoy no me puedo levantar, siendo nominado en este último por su personaje de Colate como mejor actor protagonista en los Premios de la Unión de Actores 2005 y a los Premios Gran Vía del Teatro Musical en 2007. Además ha grabado canciones con Nacho Cano, Antonio Carmona y Garciela Giordano.
Con motivo de su presencia en Huelva, Godino nos habla de su deseo de volver para conocer mejor la provincia onubense, además de contarnos sus nuevos proyectos:
– ¿Es la primera vez que viene a Huelva?
– Sí, ha sido una experiencia muy corta, pero muy bonita. He estado paseando por el puerto, me he tomado un pescadito frito y he estado muy a gusto. Me gustaría conocer más, he estado en la playa de Mazagón y la zona de Doñana, y tengo pendiente este verano ver si vuelvo a Huelva y la disfruto. La buena noticia es que vuelvo a Huelva este verano.
– ¿Qué le parece la temática de nuestro Festival?
– Me parece una maravilla que sea un festival iberoamericano. Mis mayores trabajos han sido en Iberoamérica, he trabajado en Argentina y un poco en México, y me encantaría hacer una unión España y América Latina y poder trabajar con directores de allí. Me parece que la iberoamericana es una de las cinematografías más importantes del mundo ahora mismo y además en español, que es un idioma que va a tener un futuro absoluto. Es un gusto que haya un festival que se dedique en eso, además en España, que es la tierra de los descubridores, para que después se vuelva como el regalo del arte latinoamericano aquí.
– Como los cantes de ida y vuelta…
– Ahora se cuentan historias de ida y de vuelta y nos sentimos reflejados en gentes de otros lugares y ellos se pueden sentir reflejados en nosotros. Es algo muy importante y me he sentido muy a gusto, me ha gustado mucho el festival, la organización y todo el mundo está haciendo una gran labor.
– ¿Qué nuevos proyectos musicales tiene?
– Tengo un grupo de música que se llama The Wyest, estamos empezando, tenemos muy poco dinero y ahora vamos a sacar un primer single, un primer lyric vídeo con las letras (cantamos en inglés) y pronto también un single con la cantante Angy y tres temas más y haremos un EP de cinco canciones.
– ¿Y como actor?
– Como actor tengo pendiente el estreno de varias series. Uno es un personaje muy pequeñito en una serie de Víctor Ros para TVE1, y otro, que me hace mucha ilusión, es un personaje para una tv movie que se llama Prim, el asesinato de la calle del Turco, de Miguel Bardemi, en el que interpreto a Benito Pérez Galdós. Es una cosa preciosa, estoy muy orgulloso de ese trabajo porque me gusta mucho haberlo hecho.
Luego he hecho una película, con coproducción argentino-española, que se llama Pasaje de vida y que está protagonizada por Chino Darín, que es un actorazo, por Miguel Ángel Solás, Carla Quevedo, otra pedazo de actriz que va a triunfar con esta película, y con Silvia Abascal y Charo López, entre otros. Es un film muy bonito, estoy muy contento con él. Habla de la época de la militancia montonera en Argentina y el padre de mi personaje perteneció a los montoneros y su madre murió en esa batalla, en esa militancia en los 70, que fue muy dura. Estoy muy orgulloso de haber contado esto y espero que salga muy bien en la película.
– Remontándonos un poco en el tiempo, recordemos que en El secreto de sus ojos interpretaba al malo…
– Pobre chico, un hombre obsesionado con un amor enfermizo, que era capaz de matar si no tenía a la persona deseada. Al haber pasado ese límite es captado por la triple A, que era una especie de terrorismo de Estado en aquella época en Argentina, y al final utilizaban su falta de valores para hacer trabajos sucios.
– ¿Se siente cómodo haciendo papeles de malo?
– A mí me gusta todo, pero creo que en este país no están muy acostumbrados a felicitar a los actores que hacen personajes de malos. Eso no pasa en otros países, recuerda por ejemplo a Anthony Hopkins como Hannibal Lecter o Kevin Spacy en Sospechosos habituales. Son personajes ingratos, dolorosos, porque estamos hablando de darle luz a la parte oscura de la vida y en este país parece que no queremos ver esa parte oscura. De alguna manera he sentido que me han tenido un poco encasillado en España a partir de El secreto de sus ojos, algo que fuera no me ha pasado, me han ofrecido otro tipo de personajes. Sin embargo ahora, justo con Pasaje de vida y con Prim creo que esto va a cambiar.
– Para terminar, ¿con qué personaje se queda de todos los que ha interpretado?
– Eso es difícil… ¡siempre con el siguiente!
Muchas gracias Javier. Lo esperamos en Huelva este verano.