S. D. Dicen que hay partidos que se ganan y no se juegan. Eso lo aplican los entrenadores a las finales. Puede que Alejandro Ceballos se adhiriera a ese pensamiento y planteara el partido ante el Córdoba B, en un campo difícil como El Fontanar, con esa idea. Y lo logró.
Puede decirse que el equipo lepero tuvo algo de fortuna al irse al descanso con un gol de ventaja, producto de una acción de mala suerte local, pues Cristian, en su afán de despejar un centro de Iván Aguilar, lo alojó en su marco. Pero también es cierto que el San Roque se trabajó un partido a su gusto, minimizando errores y potenciando en la medida de lo posible los fallos ajenos. Si en uno de ellos encontró un gol, miel sobre hojuelas.
Si alguien se dio cita en El Fontanar con intención de ver ese fútbol que tanto defienden los gurús de la prensa, equivocado estaban. Porque se encontraron con el fútbol que denostan, pero tan fútbol como el otro. Dos equipos muy metidos en su afán de no errar, de tratar de buscarles las cosquillas al rival, y con un entramado defensivo muy superior al ofensivo. Jugar a no jugar pudo ser una premisa para el San Roque, lo que también tiene su mérito. O es que Grecia no mereció ganar la Eurocopa en Portugal, jugando así?
Así las cosas, las ocasiones escasearon. En un partido en el que las defensas se imponen a los ataques, ninguno de los dos porteros fue exigido más de la cuenta. Un disparo lejano de Mustafá, que acabó lejos del portal local, y un lanzaniento cruzado de José Fran, también sin peligro, fueron las acciones más relavantes en ataque de los dos conjuntos.
Hasta que llegó la jugada con la que concluyó la primera parte. Una internada de Iván Aguilar, y un despeje/remate de Cristian. 0-1 y al descanso.
Como muchas veces se cumple la ley de Murphy en el fútbol -“lo que puede salir mal, sale mal”, dice su enunciado-, al Córdoba B le tocó comprobarlo. Pues apenas reiniciado el segundo tiempo, aún con el impacto del primer gol en contra, llegó el segundo. Fue Mustafá el que lo provocó, aunque para la estadística quedará que el tanto fue de Iván Aguilar. El rápido exterior sanroquista se aprovecha de un error de Toscano para plantarse ante Villanueva, pero su disparo pega en el poste. Iván Aguilar, el más listo, acabó de rematar la faena: 0-2.
Mazazo doble del que nunca pudo sobreponerse el Córdoba B, por mucho que lo intentara, primero su entrenador introduciendo cambios, y luego sus jugadores que se toparon con el ‘quiero y no puedo’ de esos días en los que sale nada.
Es más, el tercer tanto sanroquista siempre estuvo rondando en ese segundo tiempo. Iván Aguilar, Rubén Sánchez y Keita tuvieron el gol, pero esta vez se toparon con la mejor versión de Villanueva.
Más por acumulación de efectivos que por claridad de ideas, el Córdoba B logró al menos encerrar en su parcela al San Roque. Fue el momento de Nico Monclova, que se ganó su sueldo en dos acciones que, de haber acabado en gol, quien sabe lo que hubiera deparado el devenir del choque hasta su final.
Cierto que las dos porterías pasaron sus apurillos en el tramo final. Porque el Córdoba B, puede que mucho más con el corazón que con la cabeza, tratara de meterse en el partido acortando la desventaja en el marcador; y porque el San Roque, con espacios, con la tranquilidad que otorga un 0-2, también enseñó sus garras. Villanueva y Monclova se encargaron que el marcador no se moviera, aunque también se vieron favorecidos por el escaso tino de los delanteros de uno y otro en esos momento finales.
CÓRDOBA B: Villanueva, Cristian, Fran Serrano, César Morgado, Toscano, Bijimine, Austin (Quiles, 49′), David Álvarez (Sebas, 59′), Dani Hernández (José Antonio González, 75′), José Fran y Juanfran.
SAN ROQUE DE LEPE: Nico Monclova; Fran Lepe, Súper, Germán, David Llano, Ale Zambrano, Manu Fidalgo, Mustafá, Keita (Prieto, 85′), Rubén Sánchez (Juan Gómez, 67′) e Iván Aguilar (Samu, 76′).
Árbitro: Alonso Prendes (colegio asturiano). Mostró la amarilla a Sebas y David Álvarez (en el banquillo), por los locales; y a Germán y Keita, por los visitantes.
Goles: 0-1 (45′) Cristian, en propia puerta. 0-2 (46′) Iván Aguilar.
Incidencias: Partido correspondiente a la 9ª jornada de liga en el grupo IV de Segunda B, jugado en el campo de El Fontanar ante casi 300 espectadores.
