S. D. Juramentados para ganar. Con ese espíritu afrontarán los jugadores del CD Sordos Huelva el partido ante el Estambul (9:00) de los cuartos de final de la Deaf Champions League que se celebra en Belgrado. Los turcos conforman un buen equipo y era un rival que el CDS Huelva quería evitar. Sin embargo un gol de penalti en el último minuto, y que dio el triunfo al Fulham, privó del primer puesto de su grupo al equipo onubense, que le hubiera reservado un rival, a priori, más asequible.
El fútbol depara situaciones inesperadas y al mismo tiempo inexplicables. Como que la primera derrota del CDS Huelva en la fase de grupos (1-2) sucediera cuando desplegó el mejor juego hasta ahora en el campeonato. Lo malo es que el resultado no lo demostró. Los ingleses, conscientes de sus limitaciones, renunciaron a la posesión del balón y a al ataque, y les salió bien el planteamiento.
El CDS Huelva atacó todo el partido, pero fue en una contra cuando los ingleses se adelantaron. Un cúmulo de errores le dio el 0-1 al Fulham. El CDS Huelva no perdió la cabeza y siguió con su juego trenzado y organizado sin perder la calma. Las oportunidades aumentaron, pero el gol tardó en llegar. Casi a falta de 10 minutos para el final y tras dos disparos al palo, Matías logró empatar el partido.
La presión blanquiazul aumentó -a pesar que el empate le valía- y el Fulham puso todos sus hombres atrás. En la segunda oportunidad de los ingleses en todo el partido, lograron sorprender en una contra y se plantaron solo ante el portero Raúl Chirino que no pudo evitar el penalti. El conjunto inglés transformó el penalti y se volvió a adelantar en el marcador para sorpresa de todos los espectadores.
Con este resultado, el CDS Huelva queda emparejado con el Estambul, a priori, por el juego demostrado y los resultados, uno de los máximo favoritos para alzarse con el cetro continental. Aún así, no hay que olvidar que el equipo onubense es el acgual campeón y si saca el juego y coraje demostrado ante el Fulham, estará en semifinales.
