S. D. Matrícula de honor. Nota para el Por Huelva, primer equipo del CDB Enrique Benítez, que cerró la temporada con una victoria de prestigio con la que rubrica de la mejor manera posible su primera andadura por la Liga EBA. Ganar al CB Morón -publicitariamente Aceitunas Fragata-, líder indiscutible e indiscutido del grupo, fue el premio más justo para esa afición que durante todos los partidos ha estado con el equipo de Huelva.
Si desde el club se hubiera escrito un guión para el final de esta temporada, no se hubiera hecho mejor. Así hay que catalogar lo vivido en la tarde del sábado en el Andrés Estrada, felicidad completa. La que depara ganar al vigente campeón de liga en casa (75-72), y acabar en el sexto puesto en la clasificación, igualando las victorias y las derrotas (la única vez en toda la temporada).
Por eso lo de la matrícula de honor. Esa es la nota del Por Huelva en esta exitosa temporada, primera en la liga EBA. El partido que cerraba el año no era una perita en dulce. Visitaba Huelva el Aceitunas Fragata Morón, ya campeón del grupo D, y que tan solo había perdido tres partidos, uno como local y dos como visitante.
Desde el comienzo el equipo sevillano fue a por el partido, quiso marcar diferencias y casi que lo consigue. Pero hay algo que ha distinguido a este Por Huelva, y no es otra cosa que la casta, la competitividad, el no dejarse vencer por las dificultades y con esa constancia y trabajo se ganó un partido tras otros, hasta once con el de este sábado.
El parcial del primer periodo, 13-20, hacía presagiar una plácida victoria del CB Morón. Pero las rotaciones de los de negro y albero surtieron efecto y poco a poco se fueron limando las diferencias hasta lograr en el segundo periodo ponerse por encima en el marcador: 33-32. Todo por decidir tras el descanso.
La salida de los vestuarios no fue halagüeña para los locales, que tardaron demasiado en meterse nuevamente en el partido. El campeón quiso marcar diferencias y lo logró, consiguiendo renta entre diez y doce puntos. El balance defensivo no era bueno y el equipo local anduvo atascado en el ataque. Tras un parcial de 11-19 en este tercer periodo, parecía que el partido se iba a decantar de lado visitante: 44-51.
Pero el Por Huelva no es, ni ha sido, un conjunto que entregara las armas con rapidez. Y nuevamente lo demostró sobre el parquet del Andrés Estrada. Con un público que creyó en la victoria, se fue acercando en el marcador poco a poco, con estiletes martilleando (ahora sí) el aro rival desde todas las distancias. La defensa individual característica de los onubenses fue cerrando todas las puertas al aro. Ya no había contraataques por parte del CB Morón, ya los rebotes eran propiedad del CDB Enrique Benítez, y ahora sí, los tiros exteriores iban entrando uno tras otro. Un triple de José Rojas volteó el marcador, 67-66. De aquí al final las jugadas fueron vitales y todas favorables a los onubenses.
Todo salió. En este minuto y poco que faltaba para terminar el partido, se sucedieron los tiempos muertos y las estrategias. El equipo supo jugar sus armas y tras un nuevo triple de Riki Pérez puso tierra de por medio. Los tiros libre, y una gran interceptación de Antonio Gómez, hicieron el resto: 75-72. Final colosal para una gran temporada. Una liga de matrícula de honor. Sombrerazo para todos los que han intervenido este año. Todos sin excepción lo han dado todo. Se cierra una gran liga, que nunca se podrá olvidar por este equipo ha sido ¡grande!
POR HUELVA, 75 (13, 20, 11, 31): José Carlos Ramos (14), Riki Pérez (11), Antonio Rodríguez (9), Sebas Domínguez (4), Antonio Gómez (12), José Rojas (10), Carmelo Rivas (0), Nacho Romero (12), Joaquín Carrasco (3), Pedro Rabadán (0), Dani Blanco (0) y Alberto Márquez (0).
CB MORÓN, 72 (20, 12, 19, 21): Gabriel Herrera (4), Rafa Rufián (12), Juan Eloy Martínez (4), Elvis García (6), Carlos García (0), Dani Antkache (8), Joaquín Cabral (6), Alejandro Marín (11), Pape Sow (2), Alejandro Moreno (7) y José María Morales (12).
Incidencias: Partido disputado en la tarde del sábado por imposición federativa de última jornada. Unos doscientos espectadores que vibraron con su equipo.