Sergio Borrero. Con puntualidad este año, sin necesidad de mirar al cielo, las 19:30h se abrían las puertas de la Mayor de San Pedro para que la Sacramental de Pasión iniciara su estación de penitencia. Un numeroso cortejo de nazarenos, de los más destacables de nuestra Semana Santa, luciendo el clásico hábito morado de esta hermandad antecedían a ambos titulares.
Minutos después, hacía su salida el imponente paso del Señor de Pasión que fue recibido por los fieles que le esperaban con una sonora ovación. Lucía este año nuevamente su túnica de terciopelo burdeos bordada en oro en los años cincuenta por Rosario Ávila. Sobre su elegante paso dorado se disponía su tradicional monte de claveles rojo sangre a los pies de la talla que gubiase Antonio Infantes. La principal novedad la ha puesto los sones de la veterana Agrupación Musical Cristo de la Buena Muerte, de la localidad fronteriza de Ayamonte. Sones clásicos que sustituyen a los de Virgen de los Reyes y recibían a Nuestro Padre Jesús de la Pasión en el porche de San Pedro.
Cuando Nuestro Padre Jesús de la Pasión enfilaba ya el Paseo Santa Fe, desde lo alto del porche hacía su salida el palio verde bordado en oro y sedas de María Santísima del Refugio del Refugio. Una clásica composición de buquets de claveles blancos exornaba el palio de la titular. La Virgen del Refugio vestía saya en tisú de plata bordada en oro perfectamente ataviada por su vestidor. Se estrenaba también tras las andas de la Santísima Virgen la Banda de música Nuestra Señora del Rosario de Sanlucar la Mayor, que no pudo estrenarse el pasado año a causa de la lluvia.
Una gran multitud esperaba en la Plaza de San Pedro y el paseo Santa Fe desde bastante antes de la salida de la Hermandad el paso de la cofradía, una multitud que no la abandonará ya, teniendo sus primeros momentos de gran emoción en la estrechez de Isaac Peral. Digno de destacar es el cortejo de la Hermandad, tanto por el gran número de nazarenos que lo componen como por la calidad y valor de sus insignias. Un proyecto de engrandecimiento del cuerpo de insignias encabezado por Manuel Palacios, actual hermano mayor y que vivirá este año su último Martes Santo al frente de la Hermandad de Pasión.