HBN. El aceite de oliva es un elemento imprescindible en la dieta mediterránea, como da buena cuenta de ello la cocina tradicional de Huelva. Un alimento que tiene una enorme tradición en nuestro país, ya que sus orígenes se remontan a la Antigüedad.
No en vano, desde hace cinco milenios las civilizaciones del Mediterráneo han mantenido el aceite de oliva como uno de los elementos constitutivos de sus respectivas culturas.
Entre otras curiosidades, se puede citar que en la Biblia aparecen hasta 200 referencias al olivo y/o su aceite, que era utilizado no sólo como alimento, sino también por sus múltiples propiedades saludables y para ceremonias religiosas.
Aunque determinar el lugar exacto en el que se originó el aceite de oliva es complicado, sí se puede afirmar que fue en la zona situada entre Siria y Grecia. Además, se sabe es que fueron los fenicios los que introdujeron este alimento en la dieta de los habitantes de la Península Ibérica.
Posteriormente, parece ser que fueron los romanos los que implantaron aquí su cultivo, llegándose a acuñar monedas desde Roma con la forma de un olivo, donde podía leerse la inscripción de ‘Hispania’.
En definitiva, una rica historia que no ha pasado desapercibida en Huelva, porque la Cooperativa Ntra. Sra. de la Oliva de Gibraleón, muy comprometida con la historia, ha querido recordar que fueron los fenicios los responsables de la llegada del aceite a nuestra tierra.
No en vano, en su etiquetado, Oleodiel hace gala de esta cuestión que está íntimamente relacionada con el origen de Gibraleón. Porque los fenicios trajeron el aceite a la Península, pero también fueron las civilizaciones mediterráneas las que llegaron a Huelva atraídas por los ricos metales de la provincia, dada la posición estratégica en la que se encuentra la localidad olontense.
Un detalle que ha querido ser recreado por parte de la Cooperativa de Ntra. Sra. de la Oliva en la etiqueta de una de las botellas más emblemáticas de Oleodiel. Y lo hacen de la siguiente forma:
Dicen los libros de arqueología que Gibraleón fue fundada por los Fenicios, el pueblo que introdujo el olivar en la península ibérica, desde entonces todos los pueblos que han vivido en nuestra tierra han tenido en común el cultivo del Olivo, esta experiencia avala nuestro aceite.
Y así es. Gibraleón y el aceite de oliva tienen un claro nexo de unión que se ha ido afianzando a lo largo de los siglos. El aceite Oleodiel es el ejemplo más claro de esta cuestión que sigue plenamente vigente.
Un hecho histórico y cultural que demuestra la importancia que tiene Huelva en la producción de aceite de oliva de calidad. Un motivo más para consumir y degustar el buen aceite hecho en Huelva, el aceite de Gibraleón. Oleodiel.
1 comentario en «El aceite de oliva, una joya de la gastronomía onubense que trajeron los fenicios a la Península Ibérica»
Buemos aceites de Huelva, también VILLAOLIVA, de Villarrasa, OLEOBEAS, de Beas. Podría seguir…