Redacción. Desde sus inicios, la moda sigue un proceso cíclico. Las tendencias van y vienen y se adaptan a los gustos de las nuevas generaciones, reinventándose para volver a ser actuales y calar en las preferencias de la vestimenta de la mayoría de la población. Por eso, no es de extrañar que cada temporada veamos en la pasarela, y posteriormente en muchas de las tiendas, prendas rescatadas de décadas anteriores que vuelven a estar de moda.
Un ejemplo de ello son los pantalones pitillo, un básico en nuestro armario desde hace ya varias temporadas, que fueron una de las prendas más populares en los año 80. Por su parte, los pantalones de campana, típicos de la época hippy de los 70, aparecen esta temporada, aunque tímidamente, para convertirse en tendencia muy pronto. ¿Lograrán desbancar a los pitillo?
Si nos fijamos en las tendencias para esta primavera verano también encontraremos ejemplos de este tipo de prendas “clásicas”. Es el caso de los denominados crop tops, esas camisetas cortas que dejan el ombligo al descubierto. Los crop tops vienen directos de los años 50 y 60 con el objetivo de combinarse como en aquella época: faldas y pantalones de talle alto que apenas dejan ver la piel. Volverán a ser, sin duda, una de las prendas clave el próximo verano.
Igual de importantes van a ser los complementos que, a pesar de lo que muchos creen, también son fiel reflejo de las tendencias. Es el caso de las perlas, que se reinventan gracias a firmas de lujo como Chanel, y luego tiendas lowcost como Zara, sacan sus propias versiones lowcost. Igual de asequibles y de gran calidad son las perlas que podemos encontrar en la web de Mesenso, con un sinfín de combinaciones donde estos minerales son siempre los protagonistas. Este tipo de accesorios son un acierto seguro y darán el toque final a cualquiera de nuestros looks.
Por su parte, los colores que tiñen estas prendas y accesorios también siguen unos cánones establecidos principalmente por la empresa Pantone. Esta primavera, por ejemplo, los colores pasteles, que deben su origen a la corte francesa en el Rococó cuando los colores se hicieron más suaves para demostrar así su status, regresan a teñir prendas como camisas, blazers, pantalones y, por supuesto, complementos. Pero el color orquídea radiante será, sin duda, el gran protagonista de la primavera. Esta tonalidad, entre rosa y morado, tiñe nuestro armario dispuesto a dar color y elegancia a nuestros días.
Como vemos, el dicho de “todo lo viejo es nuevo otra vez” se cumple perfectamente en el mundo de la moda. De ahí que versiones de prendas clásicas, o incluso las propias prendas vintage sean cada vez más valoradas por los amantes de las tendencias.