Redacción. La alcaldesa de Huelva, Pilar Miranda, junto a la esposa de Alfonso Aramburu, Mercedes Infante; y el concejal de Presidencia y Relaciones Institucionales, Alfonso Castro; la concejal Régimen Interior y Modernización Digital; y el concejal de Cultura y Patrimonio Arqueológico, Nacho Molina, han asistido hoy a la rotulación de la calle dedicada a Alfonso Aramburu.
En un acto entrañable, que ha contado con la participación de numerosas autoridades, así como de familiares y amigos del arquitecto onubense, se ha hecho efectivo el acuerdo alcanzado en 2006, mediante el que se aprobó en sesión plenaria que Alfonso Aramburu Terrades tuviera una calle con su nombre en nuestra ciudad, como uno de los onubenses más admirados y queridos por su arte, pero también por el compromiso con su tierra natal.
Tal y como ha expresado la alcaldesa, con la rotulación de esta calle, “le rendimos homenaje a una persona buena y a una persona a la que le tenemos que agradecer las muchas cosas que ha hecho siempre en pro de todos los onubenses”. Miranda también ha asegurado que “siempre serán pocos los agradecimientos para un onubense excepcional como es Alfonso, uno de los onubenses más queridos y respetados, que continúa pendiente de su ciudad ya que prácticamente me llama cada semana para seguir dando ideas, aportando interesantes propuestas, siempre pensando en el bien de Huelva”.
Por último, una emocionada Mercedes Infante ha agradecido al Ayuntamiento la rotulación de la calle y a todos los asistentes su presencia en el acto, “estando hoy aquí demostráis el cariño que le tenéis a Alfonso, y eso es de las cosas más valiosas con lo que puede contar una persona, con el cariño de sus paisanos y de tus amigos”.
Hijo predilecto de Huelva desde el pasado mes de enero, son muchas las distinciones que tiene el arquitecto onubense. A la calle que se ha rotulado esta mañana se une la Medalla de Huelva; la Medalla de Oro de la Provincia, la Metopa de la Policía Nacional por ciudadano modélico; una mención honorífica de la Guardia Civil y el galardón Huelva-Junta 2001, por su implicación y compromiso solidario con la sociedad onubense y las causas de los más desfavorecidos, así como otras distinciones concedidas por asociaciones, colectivos y entidades.
No en vano, Aramburu fue arquitecto municipal desde 1968 a 1972, comenzó con el alcalde Federico Molina y fue él quien planificó, hace cincuenta años, la circulación de Huelva, así como las primeras peatonalizaciones de calles en el centro de la capital onubense. Se siente satisfecho de haber gestionado la cesión al Ayuntamiento de la Casa Colón y que los ciudadanos puedan disfrutar hoy día de estas instalaciones municipales.
También aportó su granito de arena para el inicio del expediente para declarar zona protegida al Paraje Marismas del Odiel.
En cuanto a su faceta de artista, ha realizado numerosas exposiciones, muchas de las cuales, de carácter solidario. Durante años realizó un taller de arte terapia en la Asociación Española contra el Cáncer. Fue además uno de los primeros en apostar por la calle como espacio para que los artistas desarrollen su faceta creativa.