Manuel Galán. La gran cantidad de jóvenes, voluntarios transitando hacia las zonas afectadas por la Dana de Valencia, representa una Gran y auténtica Procesión Magna. Las mochilas con víveres y aseo personal sustituyen a los Libros de Regla. Y las palas y escobones para barrer ocupan el lugar de Varas de mando y autoridad. Sus Túnicas tienen el color de la nobleza en tonos desapercibidos, y los signos de entrega y solidaridad es el cingulo que reviste sus valores. Son jóvenes que entienden su Fe más allá de creencias y devociones. Y manifiestan su presencia y compromiso con el Hombre de su Tiempo en los Templos de la Vida. No obedecen Estatutos ni Normas. Establecen su objetivo en la Declaracion de los Derechos Humanos. Desde la Ciudadanía Civil reclaman una Sociedad más Justa. Con su SER yel HACER van descubriendo el Camino del Tiempo Nuevo que anuncia el Siglo 21.
Jóvenes voluntarios Dana Valencia.