Redacción. Renfe pone en servicio durante este fin de semana más de 100.500 plazas (100.639) en sus servicios de Alta Velocidad y Larga Distancia para facilitar los desplazamientos Andalucía-Madrid.
Con motivo de la operación retorno de las vacaciones, la compañía ha incrementado la oferta habitual de un fin de semana con 6.700 plazas más, gracias a la circulación de 20 trenes reforzados en doble composición. Durante el fin de semana circularán un total de 282 servicios de Alta Velocidad y Larga Distancia entre Andalucía y Madrid.
Estos refuerzos se han concentrado principalmente en los servicios que unen las costas andaluzas de Málaga, Cádiz, Almería y Huelva con Madrid, así como entre la capital hispalense y Madrid.
19.000 plazas entre la Bahía de Cádiz y Sevilla
Como es habitual cada fin de semana, Renfe ha programado un dispositivo especial de refuerzo en la relación de Media Distancia Sevilla-Cádiz. De viernes a domingo se pondrán en servicio 19.000 plazas, de las más de 2.500 serán adicionales respecto a la programación habitual.
Plan operativo para días de alta ocupación
Durante este fin de semana y con motivo de la operación retorno, Renfe pondrá en marcha el plan para garantizar la eficiencia y la calidad del servicio durante los días de alta demanda de tráfico ferroviario.
Estas medidas buscan asegurar la operatividad, la atención al cliente y la coordinación entre los distintos departamentos. Para ello se incrementa el personal en talleres y en los centros de información y control.
Al mismo tiempo, todos los canales de comunicación serán activados para mantener informados a los usuarios en tiempo real y se reforzará el personal especializado en estaciones, vía, catenaria y señalización.
Además, en puntos de especial relevancia, como las estaciones de servicios de alta velocidad, se habilitarán puntos de información con personal de Renfe. Asimismo, se llevarán a cabo revisiones preventivas en climatización y confort de los trenes.
Renfe y su lucha contra el cambio climático
Renfe lidera el camino hacia la sostenibilidad ambiental. Todos sus trenes eléctricos de viajeros y mercancías cuentan con la certificación Carbono Neutro. De hecho, su huella de carbono es hasta 20 y 30 veces menor que las emisiones procedentes de coches o aviones. La circulación diaria de todos los trenes de la compañía evita al año la emisión de 4,7 millones de toneladas de CO2 y supone un ahorro energético equivalente a cerca de 1,3 millones de toneladas equivalentes de petróleo.
El horizonte de Renfe es llegar a cero emisiones de carbono en 2050. Además, forma parte de la iniciativa europea para reducir las emisiones de CO2 en al menos un 55% en 2030 (objetivo cumplido con antelación).