Redacción. La Diputación y el Ayuntamiento de Almonte han publicado una colección de reproducciones de fotografías antiguas de la romería del Rocío que capturan momentos simbólicos de su historia, “todos cargados de fervor, de alegría y de fuerza”, según ha destacado el presidente de la institución provincial, David Toscano.
La procesión de la Virgen del Rocío de 1918 -dos años antes de su coronación canónica-, el momento del salto a la reja original en el santuario o un grupo de mujeres en la presentación de Hermandades ante la Matriz en 1930 son algunas de estas fotografías antiguas del Rocío, “que forman parte del Centro de Estudios Rocieros, han sido seleccionadas al detalle y nos llevan al Rocío de otra época, a la romería que el pueblo de Almonte celebraba en las primeras décadas del siglo pasado”.
Para el presidente de la Diputación, las romerías y tradiciones de primavera en los municipios de la provincia de Huelva “forman una parte importantísima de nuestra cultura, y la romería del Rocío, que concentra a cientos de miles de personas cada año, es la más visible representación de esta identidad”
En la cuenta atrás para la celebración de la romería de 2024, “la mayor expresión de fe mariana de España», la Diputación de Huelva ha querido colaborar “en la difusión de sus valores y de su historia, para que sean conocidos por futuras generaciones”. Toscano ha felicitado al ayuntamiento de Almonte por esta iniciativa, una “colección para la historia” que el Ayuntamiento de Almonte distribuirá entre escolares y la ciudadanía en general, en la antesala del Rocío, en el marco de la tradicional ofrenda floral en el entorno del Monumento a la Virgen.
El alcalde de Almonte, Francisco Bella, ha agradecido la contribución de la Diputación por esta “magnífica carpeta” que a recuperar la tradición, “de las décadas de los noventa y primera de este siglo de distribuir láminas o reproducciones para difundir la cultura rociera”. Para el primer edil almonteño el Rocío es “fundamentalmente emoción: lo que mama un almonteño desde que nace, pero que es tambiénn lo que nos une a las personas de todo el mundo que vienen al Rocío”. Respecto a la colección de fotografías, ha afirmado que El Rocío es “como un agujero en el tiempo, si empezamos a quitar componentes más antiguos siempre llegamos a la esencia del Rocío, y eso es algo que se puede apreciar en los detalles de estas imágenes”.
Entre ellos, batas rocieras de las mujeres “para bailar sobre la arena”, los “buscanovios”: hombres que llevaban flores en el sombrero como indicativo de su soltería, o la reja original del altar de la Virgen, cuando tenía pinchos hasta que, años después se eliminaron, y se puso una reja doble para impedir que el salto fuera tan fervoroso como sigue siendo”.
Bella ha explicado que estas fotografías del Centro de Estudios Rocieros fueron -adquiridas a la Fototeca de Sevilla del fondo del fotógrafo Serrano- “consiguen transmitir ese ansia que los almonteños sentimos por la Virgen del Rocío”. La portada de la carpeta fotográfica reproduce la imagen del único Simpecado que llega al Rocío a caballo: el de la Hermandad Matriz de Amonte”
