Ramón Llanes. Este lugar hace gala de buenas maneras en la estética, en el contenido, en su configuración y en su organización cotidiana; viene a ser referencia en una zona habitada principalmente por jóvenes, abierta, diáfana en su arquitectura y modernista en su concepción, el espacio cultural del Centro le concede más sentido y aportará mayor empaque cuando pronto la ciudad siga creciendo a ese sur del Ensanche. Para quienes no frecuentan su museo y sus instalaciones y para quienes no asisten a conferencias y foros de debates no les resultará extraño su cambio de ubicación pero para los consumidores de cultura -que son cada vez más en nuestra ciudad- modificará sus costumbres y les supondrá un desencanto.
Este Centro, que está dedicado a Jesús Hermida, es amplio, cómodo y funcional; se albergan piezas muy importantes de la historia de la humanidad y tal vez no podrá caber en el otro lugar que está pensado para su traslado. Y si acaso fuere por escasez de motivación en asistencia procederá dotarle de mejores medios para conseguir más atención por parte de los ciudadanos pero no será buena idea intentar buscarle más cuotas de rentabilidad porque la cultura, como el jardín, la farola o las aceras, no se miden con elementos de mercantilidad.
Si de la instancia municipal se precisa criterio antes de tomar una definitiva decisión consúltese a quienes ya opinaron sobre el asunto como Terán, Díaz Trillo, Jaime de Vicente, etc. y a otros relacionados con esta parte de la cultura y óbrese consensuadamente, que estos personajes nombrados serán buenos consejeros.
Centro de la Comunicación Jesús Hermida.
1 comentario en «Del Centro de la Comunicación ‘Jesús Hermida’»
Coincido totalmente con la opinión de Ramón Llanes.
Estoy convencido, por otra parte, de que Pilar Miranda y la Corporación Municipal han abierto o abrirán una línea de diálogo para alcanzar una solución idónea, que sin duda debe pasar por la promoción del Centro para que onubenses y visitantes conozcan y visiten un «Museo» absolutamente singular.