RFB. En nuestra Punta Umbría de siempre, aquella que rememoramos los vivos que albergamos recuerdos de la niñez en el paradisiaco enclave, emerge como referente de lugar ‘La Peña‘. Ahora su vestigio es la denominación de la plaza cruce de caminos para llegar a La Canaleta, cerca de la vieja rampa de la Ría. Pero de esas decenas de miles de residentes o veraneantes hay algunos que saben el porqué de ese nombre. Cuando pasamos por esa plaza siempre pensamos en cuantas historias vitales, la mayoría seguro que de disfrute y bienestar, alberga ese espacio antaño completamente diferente.
La Peña fue en su etapa original, y de forma muy breve -solo una temporada- un hotel. El primer hotel de la historia de Punta Umbría. Y aunque cuando se construyó, en 1916, la localidad costera seguía siendo una ‘colonia’ inglesa, la iniciativa partió de una empresa española. La oportunidad de construir un hotel en Punta Umbría era evidente. Los directivos ingleses pugnaban entre ellos para obtener plazas en las catorce casas construidas sobre pilares en las dunas e incluso, entre 1908 y 1916 se había optado, ante la escasez de alojamientos para la demanda por habilitar tiendas para alojar a los solteros de la compañía.
Con La Peña pasó un poco como con el Hotel Colón de Huelva. Ante el fracaso de la iniciativa empresarial al final fue la propia compañía minera la que adquirió el inmueble para su staff. De este modo Riotinto CL pasó a contar con más disponibilidad de plazas ante la demanda tan creciente de veraneo. Cabe recordar que en principio las primeras 12 casas de madera construidas conformaban lo que venía a ser un sanatorio. Eran casas de salud. Pero el descubrimiento de las playas -Sundheim, siempre Sundheim- como lugar de simple esparcimiento y veraneo cambió el concepto de uso y ya las 14 casas de 1917 eran ‘disputadas’ para eso, para disfrutar en el verano. También recordamos que junto a las doce casas iniciales hubo una construida por un alemán, la casa de Moncke que luego sería de Clauss, algo no muy conocido.
El edificio de La Peña tenía una estructura mixta de hormigón y madera, pero la definición estética y funcional era similar a la de las casas precedentes de los ingleses en Punta Umbría. Conformaba un total de siete viviendas familiares. Al lado de La Peña se construyó un edificio de una sola planta con diez dormitorios, para solteros.
La Peña, lamentablemente como el resto de los edificios de la Compañía, fue demolida en su momento. Hay fotos de principios de los años cincuenta del pasado siglo donde permanece aún el edificio en pie. No sabemos si entonces aún en uso. Parece mentira que de esos elementos identitarios de esta capital veraniega como eran las casas de los ingleses solo quede en pie el resto de una de las casas de guarda, al fin y al cabo un elemento auxiliar. Afortunadamente está en fase de rehabilitación por parte del ayuntamiento. Menos es nada, pero que triste.