Ramón Llanes. La Sala de la Provincia de la Diputación provincial, en la Gran Vía, recibe estos días la exposición fotográfica ‘Mensaje en Piedra‘, del prestigioso fotógrafo nervense Juanma Nogales. El acto de inauguración, el pasado 29 de junio constituyó un éxito rotundo. Amigos de la adolescencia les dirigieron unas palabras de cariño y pusieron en valor el arte y la técnica fotográfica de lo expuesto. También colaboraron las poetas Ana Deacracia y María Luisa Domínguez Borrallo con un poema que leyeron al público. Javier Sánchez Durán, por su parte, había escrito el verso que da paso a la exposición. Estará abierta hasta el 22 de julio y que gozará de visitas guiadas por el propio autor determinados días. Una interesante propuesta para no perderse en este inicio de verano.
‘Mensaje de Piedra‘ es una muestra excepcional. No es habitual encontrarnos con un conjunto de imágenes que cuenten la entrañable historia de la piedra con una pasión tal que subyugue a aquellos que admiren esta propuesta emocionante.
El autor parte desde la geología hasta recoger los diferentes usos que como humanidad hemos ido resolviendo. Desde la piedra como herramienta, hogar y refugio, como lo más prosaico, hasta el más sublime sentido de la belleza, acercándose también a la piedra como soporte mágico, como lugar divino desde donde fantasear con una eternidad, desde donde sentirnos poderosos como si también nosotros tuviésemos el poder de la propia piedra.
La exposición, en la que ha invertido los últimos cinco años, abarca toda la península ibérica, y así nos descubre una cincuentena de lugares verdaderamente interesantes desde el punto de vista estético e histórico, pero sin dejar a un lado la manifestación de un discurso de piedad y coherencia a favor del cuido y del respeto que el planeta merece.
Juan Manuel Nogales se adentra por nuestros caminos onubenses, entre otros lugares de la península, y nos ofrece el Dolmen de Soto, el de Pozuelo, las huellas de animales prehistóricos de Matalascañas, o nos encanta la vista con las imágenes de Turóbriga o la maravillosa Constelación de Zalamea, además de ofrecernos uno de los últimos hallazgos: la Dama Diademada en Cañaveral de León, entre otras fascinantes propuestas.
Todo ello en un ambiente singular donde podemos disfrutar de la emisión de una proyección que nos permite vivir parte de esta experiencia. Una exposición que intenta ensalzar el alma de la piedra, desechando la denostación del propio término para convertirlo en todo corazón.
